donostia - Un grupo de independientes de Junts per Catalunya anunció ayer la creación de Junts per la República, una nueva asociación en la que destacan nombres como los de Elsa Artadi o Eduard Pujol, del entorno de Carles Puigdemont. Esta plataforma llega después de que Puigdemont apostara por extender la experiencia de JxCat a otros comicios. En cualquier caso, los promotores de la asociación matizaron ayer que no pretenden absorber al PDeCAT. Tienen previsto celebrar antes de Semana Santa su asamblea constitutiva, en la que presentarán su manifiesto fundacional.

La entidad, con vocación transversal, sin carnés de partido, no pretende plantear “ninguna OPA al PDeCAT”, sino contribuir al “buen funcionamiento” de JxCat, según fuentes consultadas por Efe. Alrededor de una veintena de los 34 diputados de JxCat son independientes, y el resto tienen carné del PDeCAT, aunque estos tampoco conforman un grupo homogéneo, ya que se mezclan perfiles próximos a la dirección ejecutiva de los demócratas con otros como el propio Puigdemont.Por otra parte, el Gobierno español acordó ayer cesar al que era secretario de Difusión de la Generalitat, Antoni Molons, tras su detención el pasado jueves en el marco de la investigación sobre los gastos del Govern para la financiación de la campaña de publicidad del referéndum del 1-O. En una conversación informal con periodistas tras la rueda de prensa del Consejo de Ministros, el portavoz del Ejecutivo del PP, el ministro Iñigo Méndez de Vigo, comentó que “la decisión, en virtud del artículo 155 de la Constitución, obedece a que Molons está siendo investigado”. Antoni Molons dependía del departamento de Presidencia, dirigido por Jordi Turull hasta su cese como conseller el pasado 27 de octubre. Curiosamente, en ningún otro proceso de presunta corrupción en el que se ha visto afectado por ejemplo el PP se ha producido una decisión parecida de inmediato en sus filas.

Molons fue detenido y puesto en libertad ayer por la Guardia Civil, que registró su vivienda y su despacho en el Palau de la Generalitat en una operación ordenada por el titular del Juzgado de instrucción número 13 de Barcelona para averiguar si el Govern financió la publicidad institucional del 1-O a través de pagos a Òmnium Cultural. El secretario de Difusión, un político del PDeCAT con estrechos vínculos con el exsecretario de Comunicación del Govern David Madí, hombre de confianza a su vez del expresident Artur Mas, fue nombrado en enero de 2017 secretario de Difusión, adscrito a la consellería de Presidencia, en sustitución de Jordi Vilajoana.

Desde el área de Difusión, Molons, que también fue director general de Medios de Comunicación entre 2011 y 2016, se tuvo que coordinar con la secretaría de Comunicación del Govern, en manos de ERC a través de Miquel Martín Gamisans. Molons prosiguió con sus responsabilidades tras la activación del artículo 155 de la Constitución que suspendió el autogobierno catalán y que comportó en primera instancia la destitución de unos 150 cargos de confianza y asesores del Govern.

INVESTIGACIÓN Los investigadores tienen la sospecha de que desempeñó un papel clave en la financiación de las campañas publicitarias mediante pagos opacos, con los que la Generalitat pretendía supuestamente burlar la prohibición del Tribunal Constitucional de destinar partidas de los presupuestos al referéndum. Molons ya declaró como testigo en noviembre ante la Guardia Civil, en el marco de la investigación por la preparación del referéndum, en un interrogatorio en que apuntó al exconseller de Presidencia Jordi Turull, imputado por rebelión, como responsable de autorizar la publicidad del 1-O.