Un empresario nipón visita Donostia en busca de cocineros de renombre

donostia - La presencia de japoneses en Donostia no solo tiene carácter vacacional o de ocio. En los últimos tiempos, los proyectos empresariales están también detrás de algunas de las visitas llegadas del imperio del Sol Naciente. El pasado viernes, sin ir más lejos, el alcalde, Eneko Goia, recibió en el Consistorio a una amplia delegación de la ciudad de Taki, encabezada por el empresario Te-tsuya Tachibana y el cocinero Ryuji Teshima, del restaurante Pages de París, que posee una estrella Michelín.

Tachibana ha visitado la capital guipuzcoana y sus alrededores con el fin de llegar a un acuerdo con alguno de los cocineros más renombrados de nuestro entorno con el fin de que se haga cargo del restaurante principal que prevé crear en el complejo que desarrollará en Taki, cerca del monasterio sintoista de Ise, el más importante de Japón, un lugar al que se acercan cada año doce millones de personas.

La idea empresarial consiste, según explicaron fuentes municipales, en crear un hotel tipo resort, especialmente dedicado a la gastronomía japonesa y vasca. Para ello, Tachibana desea contar con un restaurador donostiarra, dentro de los primeros espadas de la ciudad, que dé brillo y buen hacer al restaurante. También contempla incluir en el complejo turístico una zona con algunos bares de pintxos, en homenaje a Donostia, un espacio que se denominaría Little San Sebastian y en el que se tratará de reproducir tanto la cocina como la forma de degustarla en la capital guipuzcoana.

El pasado mes de enero, otra delegación de la ciudad de Taki, en aquella ocasión encabezada por el alcalde de la localidad, Yukio Kubo, visitó a Goia dentro del mismo proceso de acercamiento a la cocina donostiarra de cara a su exportación al país asiático. El objetivo de aquella presencia fue tomar ideas y conocer el Basque Culinary Center y la escuela de Irizar así como Arzak, entre otros lugares.

La ciudad de Taki, de poco más de 14.000 habitantes, forma parte de la prefectura de Mie, en la que se halla el famoso santuario y es conocida por la calidad de sus carnes.