Geología, historia y música

Un domingo más, alrededor de 160 personas madrugaron para disfrutar de la penúltima etapa del 2016 bidea. El pleno de asistencia ya no es una sorpresa, y es que durante el último periodo del proyecto, 2016 bidea ha demostrado su capacidad de convocatoria con una media de más de 100 personas en cada uno de los recorridos realizados.

La ruta y el programa de la etapa número 31, desde Hondarribia a Pasaia, que prometía y no defraudó. Tras las presentaciones del último protagonista del proyecto, el periodista Juanma Sotillos, el grupo comenzó a caminar en dirección Las Paramoudras. Allí tuvo lugar la primera parada del día para asistir a una explicación sobre la riqueza geológica de Jaizkibel. En esta parada, demás de explicar los distintos tipos de paramoudras, se comentaron algunos datos curiosos del lugar, como que Jaizkibel, con aproximadamente 500 metros de altura, tiene una profundidad de 1.500 metros.

Tras esta interesante intervención el grupo continuó con el recorrido hasta encontrarse, por sorpresa, con el ilustre Victor Hugo. Las distintas actuaciones del grupo Jour de Fête, en clave de humor, mezclando teatro e improvisación, fueron el principal hilo conductor durante el resto de la jornada. En total, se realizaron tres intervenciones durante el recorrido; un monólogo del autor, una escena que comenzaba con la frustración de una artista sin inspiración; y la tercera y probablemente más exitosa, una intervención sobre los roles de hombres y mujeres entorno al mundo del mar. Esta última se realizó a la llegada del grupo a Pasaia Donibane.

Tras esta intervención, los participantes se dividieron en grupos para poder visitar la casa-museo del autor francés, ubicada en pleno centro del municipio pasaitarra. En el interior, pudieron disfrutar de sorpresas como el dúo ofrecido por dos actores (Victor Hugo y su acompañante), quienes interpretaron al piano la famosa canción de la banda sonora de la película La vida es Bella Life is beautiful that way.

Y así, entre risas y buen ambiente, llegó el final de la jornada. Victor Hugo se dirigió hacia el batel mientras el grupo se despedía de forma efusiva. Así, con este simbólico adiós, solamente queda esperar a la semana que viene para poder celebrar y disfrutar, ya por última vez, de 2016 bidea. - N.G.