donostia - El temporal de este fin de semana va por fases y por el momento Gipuzkoa se ha librado de grandes daños por inundaciones que sí causaron destrozos notables en algunas comarcas de Bizkaia. Primero fueron las olas y el viento; luego la lluvia, que dejó de ser ya una amenaza seria en el territorio a primera hora de la mañana de ayer; por la tarde le siguió el granizo, que causó trastornos de circulación en varios puntos de Gipuzkoa... y ahora es el turno de la nieve, que ayer ya provocaba los primeros problemas de tráfico en puertos de montaña y zonas altas y amenaza hoy con precipitaciones considerables en las zonas del interior.
No se descarta incluso que pueda nevar cerca de la costa, en torno a los 100 metros de altitud, en momentos de tormenta, pero la cota de nieve se sitúa, según Euskalmet, en torno a los 200 o 300 metros.
Todo ello después de que las aguas volvieran ayer a su cauce y no causasen importantes daños en Gipuzkoa, salvo pequeñas inundaciones en garajes y empresas cercanas a los ríos Deba en Oñati, Oria o Urumea. Los peores momentos se pasaron durante la madrugada, pero ya con la luz del día el cielo dio un respiro y se desactivaron las alertas roja (Deba) y naranja (Urumea) por inundaciones.
En lugares críticos como el barrio del Pilar de Martutene, en Donostia, se pasó “un poco de miedo”, aunque finalmente el río Urumea no desbordó. El Ayuntamiento de Donostia activó allí el plan de emergencia al ver que el nivel del río alcanzaba los 3,74 metros y pasadas las diez de la noche del viernes se enviaron sms a los vecinos de Txomin Enea y Martutene, poniéndose en marcha el servicio de autobús gratuito para que trasladaran sus vehículos a Garbera.
Ya por la mañana, el cauce del río había bajado de forma considerable y la mesa de crisis decidió que los vecinos podían recoger sus coches. Aguas del Añarbe aprovechó para desembalsar algo de agua y prepararse para acoger las próximas lluvias.
El viernes por la tarde también se había desalojado a 51 personas del poblado de chabolas de Astigarraga, que pasaron la noche en un albergue municipal, pero ante la remisión de las lluvias y el descenso del cauce de Urumea, fueron conducidas nuevamente al poblado durante la mañana de ayer.
Las instituciones pidieron a la población que permanezca tranquila porque lo peor ya ha pasado y las incidencias del agua no han sido graves. Los problemas, vestidos de blanco, se centran ahora en la carretera.
primer corte de tráfico por nieve El granizo ralentizó el tráfico por la tarde en la N-I y también tiñó de blanco Donostia, mientras la nieve, que golpeó primero Araba, llegó por la tarde a Gipuzkoa provocando problemas en la red principal, especialmente en la autovía de Leizaran (A-15). Allí el tráfico estuvo cortado a la altura de Andoain, en sentido Pamplona, debido a la presencia de camiones atascados poco después de las 18.00 horas. La nieve también hizo acto de presencia en puertos de montaña y tiñó de blanco Etxegarate, sin que se llegara a cortar el tráfico al cierre de esta edición.
El interior de Euskadi está en alerta naranja hoy por nieve y se mantiene el aviso amarillo por lluvias persistentes, oleaje y viento en Gipuzkoa y Bizkaia.