Como es habitual, el director del Zinemaldia, José Luis Rebordinos, se encontraba en el María Cristina este domingo despidiendo a las últimos actores, actrices, realizadores y equipos de las películas que han participado en la 70ª edición de la que el sábado se dio a conocer su palmarés. Recibe a este periódico para hacer el balance de una edición que ha demostrado la fortaleza y la salud de un Festival que empieza a estar en boca de todos en el extranjero.

Pese a la ausencia de Glenn Close, la 70 edición ha contado con grandes realizadores y con estrellas como Liam Neeson, Olivia Wilde o Ana de Armas.

La ausencia de Glenn Close fue un jarro de agua fría, pero me duró dos minutos. Se nota que el Festival ha aumentado la presencia de estrellas y ha habido grandes realizadores como Mia Hansen-Love, Alejandro González Iñárritu, Louis Garrel, François Ozon, los hermanos Dardenne han venido por primera vez...

En el eterno debate de plataformas contra salas parece que los festivales se han convertido en el refugio que vuelve a convertir el cine en evento.

La única seguridad es que las plataformas no se van a ir y los exhibidores tienen que ser conscientes de ello. A partir de ahí habrá que trabajar para recuperar el cine en salas. fuerte. Desde la exhibición hay que hablar con las plataformas y pactar con ellas. ¿Hay que pactar, quizá, que el beneficio que tiene el cine online repercuta de alguna manera en las salas? Claro que las plataformas tienen un efecto negativo, pero estudiemos las maneras de que el efecto sea positivo.

Parece que el Zinemaldia se encuentra fuerte, ¿este hecho lo posiciona mejor en la competición por captar películas?

El Zinemaldia goza de buena salud, también dentro de la industria, y eso quiere decir que la gente quiere venir y si la gente quiere venir es más fácil conseguir películas. Detrás de la película de clausura, Marlowe, que fue la prèmiere mundial, hay seis inversores muy importantes. La despedida ha sido muy bonita porque no conocían Donostia ni el festival y les ha encantado. Además, han alucinado con el público. El Zinemaldia vive un buen momento y no es casualidad que tengamos nombres importantes y películas de gran nivel. Vivimos un momento muy bueno pero la duda es hacia dónde queremos ir.

"Estamos en un momento en el que podemos crecer, pero hay que tener mucho cuidado con esto, no hay que dar un paso hacia adelante si luego hay que retroceder"

¿Y hacia dónde quiere ir?

Estamos en un momento en el que podemos crecer, pero hay que tener mucho cuidado con esto, no hay que dar un paso hacia adelante si luego hay que retroceder. Somos una ciudad pequeña, para bien o para mal. No podemos crecer hasta donde podríamos. Pero no nos engañemos, que sea pequeña también nos da cosas. Me gustaría hacer un festival como el que tenemos ahora, mejorando aquello que podemos mejorar. Tenemos que estudiarlo bien. Necesitamos más dinero pero yo entiendo a las instituciones. 

¿Van a pedir un aumento en la financiación pública?

Yo no me quejo. Las instituciones están aportando una gran cantidad en un momento complejo. Nunca voy a discutir lo que pongan, lo que voy a hacer es pedir más y les explicaré por qué necesito más. Si me dicen que me quitan dinero para ponerlo en Sanidad o en Educación, ¿qué voy a decir? Pues que estupendo. Dentro de poco tengo pensado hablar con el presidente del consejo de administración, que es el alcalde Eneko Goia, y luego hablaré con el resto de instituciones. Tenemos que plantearnos qué financiación vamos a tener de estas instituciones.

También buscan financiación privada.

Hemos conseguido casi 200.000 euros más que en 2019. 

"Ha habido excesiva presencia cine español en el Zinemaldia, pero es que era difícil decir que no a las películas que han estado en los grandes festivales; creo que un poquito menos sería mejor"

Con esa financiación, ¿cómo le gustaría que creciese el Zinemaldia?

A nivel de películas, el Festival tiene una estructura muy buena; no la cambiaría. Donde creo que deberíamos promocionarnos y avanzar aún más es en la parte dedicada a la industria. Este año el encuentro de inversores nos ha posicionado muy bien. Ha habido 400.000 euros que provenían del fondo de recuperación de UE. Creo que el fondo de inversores en cuatro o cinco años puede ser muy potente. De hecho, varios inversores que han venido a Donostia me contaban que en Toronto todo el mundo se preguntaba qué ocurría en Donostia para que algunos de los grandes nombres viniesen al Zinemaldia. Además nos ha permitido hacer red con el Festival de Málaga.

¿En qué sentido?

Creo que desde que lo dirige Juan Antonio Vigar lo están haciendo de maravilla. Se ha convertido en un lugar estupendo para el cine latinoamericano y estatal. A Donostia le viene muy bien que Málaga saque parte del cine español, nosotros no podemos sacar tanto. Incluso, yo que soy responsable de haber seleccionado todo el cine español que se ha proyectado, creo que había excesivo cine español en el Zinemaldia, pero es que era difícil decir que no a las películas que han estado en los grandes festivales; creo que un poquito menos sería mejor.