El Zinemaldia vuelve a su ser, a todo su esplendor y lo hace con una propuesta que parece cargada de ironía. La película de inauguración del primer Zinemaldia de la normalidad, tras dos ediciones marcadas por las restricciones de la pandemia, se ambienta en una cárcel. Modelo 77, protagonizada por Javier Gutiérrez, Miguel Herrán y Fernando Tejero y dirigida por Rafael Cobos y Alberto Rodríguez, cuenta el motín que se produjo en la prisión catalana y se exhibirá en la sesión principal que ocupará la noche del auditorio Kursaal, después de la gala que conducirán Paco León y Loreto Mauelon, y que será dirigida por el cineasta riojano Santiago Tabernero.

Quien no estará presente en la gala (de este año, por lo menos) es Glenn Close, la presidenta del jurado oficial más breve que ha tenido el Zinemaldia. En cambio, el resto del tribunal, incluyendo el sustituto de la estadounidense, el productor argentino Matías Mosteirín, así como la cineasta Tea Linderburg, la escritora Rosa Montero, Antoinette Boulat, el cineasta y artista visual Lemohang Jeremiah Mosese y el director y guionista Hlynur Pálmason pasearán por la alfombra roja del Kursaal.

Los reputados cineastas François Ozon y Hirokazu Koreeda, que desde ayer se encuentran en Donostia, también asistirán a la inauguración.