“Trabajar con buenas actrices facilita las cosas”
La plataforma de streaming HBO Max estrenó este verano ‘Furia’, una serie creada y dirigida por Félix Sabroso y protagonizada por cinco grandes actrices que coinciden por primera vez en pantalla: Candela Peña, Carmen Machi, Cecilia Roth, Nathalie Poza y Pilar Castro
A lo largo de ocho episodios, Furia traza un retrato contemporáneo, intenso y realista de cinco mujeres que se enfrentan a situaciones límite: extorsión, opresión, manipulación, exclusión o engaño. Cada historia, conectada con las demás en un mismo universo narrativo, se desarrolla como una reacción en cadena, donde un conflicto desencadena el siguiente hasta desembocar en una catarsis compartida. La serie construye un relato coral con mirada femenina, repleto de sorpresas, ironía y humor negro, y se convierte en un kaleidoscopio emocional y social que interpela al espectador desde el primer minuto.
¿Cómo se gestó la serie?
Vivimos, desde hace ya más de una década, un momento cada vez más violento, desconcertante y confuso. Siento que quienes hacemos ficción, ya sea audiovisual o escrita, tenemos un cierto deber de observar y analizar nuestro entorno, porque este es un tiempo tan inquietante como inspirador. Sabemos que existen otras herramientas sociales, e incluso otras formas de estudiar la realidad, pero nosotros, desde el terreno creativo, podemos ofrecer una mirada útil que nos permita imaginar otras posibilidades. El retrato satírico, además, nos ayuda a analizar el momento e incluso a descongestionarlo, relativizándolo.
¿Hubo alguna actriz a la que le costó convencer para entrar en este proyecto?
Al contrario, he tenido muchísima suerte con la complicidad y el apoyo de todas desde el principio. En ese sentido, soy un privilegiado.
¿Se conocían entre ellas? ¿Cómo fue el primer encuentro con las cinco juntas?
No han tenido que rodar demasiado juntas; solo hubo algunos pequeños encuentros. Lo que en un principio parecía una ventaja, al final les hizo echar de menos más cruces narrativos de los que ya existen. En cualquier caso, se conocían bien entre ellas.
¿Cómo construyó estas cinco mujeres tan distintas? ¿Están inspiradas en personas reales o en arquetipos contemporáneos?
Es cierto que parto de la observación de lo que me rodea, pero no se trata de arquetipos concretos ni de perfiles que formen parte de mi entorno de un modo específico. Son, más bien, representaciones simbólicas, a veces, de grandes temas que nos preocupan y que forman parte del momento actual.
¿Qué une a estas cinco historias en apariencia separadas?
Todos los personajes, aunque tienen historias diferentes, comparten algunos denominadores comunes: el desconcierto ante la realidad, la negación de la misma y una defensa aterrada, furiosa, casi de supervivencia. Interrelacionar las historias me permitía hablar de cómo, en el caos que vivimos, todo está, de algún modo, concatenado.
¿Ha habido momentos de improvisación, de aportaciones creativas por parte de las actrices?
La serie no propone un tipo de diálogo naturalista; al contrario, hay bastante artificio en ese sentido. Por lo tanto, no dejé demasiado espacio para la improvisación. Otra cosa es cómo procesamos el trabajo en equipo: yo, por supuesto, estaba receptivo a la mirada de las actrices y a sus propuestas, pero el texto es otra cosa.
¿Cómo fue ver por primera vez a las cinco actrices encarnando a sus personajes? ¿Le sorprendieron en algo?
Siempre es un momento feliz cuando una buena actriz da vida a un personaje que tú has plasmado en el papel. Es como un nacimiento. Suele despertar en ti una mezcla de entusiasmo y un profundo agradecimiento. Trabajar con buenas actrices facilita mucho las cosas.
¿Alguna escena particularmente difícil de grabar emocional o técnicamente?
Evidentemente, las secuencias con acción, fuego, peleas o efectos especiales requerían procesos técnicos más complejos, exigentes y lentos. Pero, en general, ha sido un rodaje muy dinámico y disfrutable.
"Ha sido un rodaje muy dinámico y disfrutable"
¿Cuál de las cinco protagonistas tiene algo más de usted?
Todas y ninguna. Les ofrecí toda la información que tenía al escribir los personajes, pero ellas aportaron mucho de sí mismas.
¿Qué le gustaría que sintiera el espectador al ver la serie?
En primer lugar, me gustaría que la disfrutase y que la reflexión que propone, desde su ironía, le deleitase con la idea de darle vueltas al asunto. Que nos divirtamos pensando un poco sobre lo que estamos haciendo, o mejor, sobre lo que estamos deshaciendo de nuestra realidad.
¿Cree que en el audiovisual actual faltan aún más historias contadas desde personajes femeninos potentes y complejos?
Creo que la realidad siempre nos invita a retratar y recrear nuevas historias que, aunque parezcan ya contadas, pueden resultar sorpresivas o novedosas según la intención y la mirada con la que se aborden. Siempre hay algo que contar, porque siempre existe el placer de escuchar y de imaginar.
Los episodios tienen una duración de unos 25 minutos. ¿Es complicado contar algo tan intenso con una duración tan corta?
Efectivamente, condensar cinco tramas en tan poco tiempo era lo esencial, pero resultó estimulante y, desde luego, muy divertido asumirlo.
¿Qué supone para usted este proyecto dentro de su trayectoria?
Tengo la sensación de que condenso muchos años de trabajo y maduración narrativa. También siento que estoy ante un momento definitivamente intenso e interesante para mí. Y, desde luego, tengo la intención de entregarme en mi mejor versión.
Temas
Más en Cine y Televisión
-
‘Directo al grano’ llega a La 1 con “rigor, claridad y dinamismo”
-
‘Operación Triunfo’ vuelve a Prime Video ampliando horizontes
-
Fernando Tejero deja sin palabras a Broncano con su declaración en directo: "Igual tengo posibilidades"
-
Mariló Montero incendia las redes tras reivindicar la tauromaquia en 'La Revuelta': "A la altura de los cavernícolas"