La exministra de Igualdad Irene Montero se ha mostrado implacable contra el programa TardeAR tras su entrevista a 'El Yoyas', exconcursante de Gran Hermano detenido condenado por violencia machista.

Beatriz Archidona se estrenó como presentadora de verano del programa este lunes con una entrevista desde prisión con Carlos Navarro, más conocido como 'El Yoyas'.

"Los medios de comunicación tienen obligación (art.14 Ley 1/2004) de proteger la dignidad de las víctimas de violencia machista. Dar voz a un agresor machista revictimiza a la víctima, legitima a otros agresores y pone en riesgo a todas las mujeres normalizando la violencia", ha escrito Montero este martes en su cuenta de X criticando el papel del programa de Mediaset a la hora de dar voz a un acusado por violencia machista.

En la misma dirección, la presentadora Carlota Corredera también ha querido mostrar su rechazo a esta entrevista. "Hoy y siempre con las víctimas, hoy y siempre contigo, Fayna. Dar voz a los maltratadores es ser cómplice de la violencia machista. Los periodistas tenemos obligaciones recogidas en la Ley Integral contra VG (Violencia de Género) y no contempla blanquear maltratadores", señalaba.

Mensaje de Mercedes Milá

Mercedes Milápresentadora del programa donde concursó el agresor y su víctima, rompió su silencio este sábado en referencia a esta polémica y le dedicó unas palabras Bethencourt en las redes sociales.

"Gran Hermano me dejó muchas escenas grabadas para siempre. De las más delicadas no he hablado nunca por respeto a los protagonistas, pero lo de hoy es diferente.

Se formaron muchas parejas entre aquellas paredes, alguna todavía vive.

El amor de Carlos y Fayna fue una relación vivida minuto a minuto por los millones de espectadores que veían el programa con fruición y, por supuesto, por el equipo que lo hacíamos.

Pero no tardaron en llegar los malos modos y las escenas violentas que obligaron a los responsables a expulsarlo de La Casa.

Al salir cayó en mis manos, y recuerdo que le hice una entrevista sin piedad pero dejando espacio para el arrepentimiento. Él lo agradeció.

Acabado el programa vivieron juntos y tuvieron hijos. Él escribía poesía que traía a nuestra librería con la esperanza de venderla pero no lo conseguía.

Nunca supe del infierno que vivían Fayna y los niños. Lo supe cuando lo juzgaron y lo condenaron. Carlos Navarro era un maltratador de libro y, a pesar de eso, Fayna Bethencourt tuvo que luchar a brazo partido para que la justicia la escuchara, admitiera sus pruebas y la protegiera de el padre de sus hijos.

La historia es conocida: cumplía condena por fin y en un permiso penitenciario no volvió a prisión; se escapó.

Hace muy pocos días ha vuelto a ser detenido pero la indignación por los dos años que los cuerpos de seguridad tardado en hacerlo es compartida por millones de personas.

Fue un amor compartido. Fue un amor que llenó nuestros corazones. Ahora la alegría de saberlo en prisión es amarga pero es justa y sobre todo segura.

Querida Fayna @faynabethencourt, qué grande has sido durante todo este tiempo eterno. ¡Nos has dado tantas lecciones a todos!

Tus ojos azules han visto lo más negro del desamor y sin embargo has mantenido una dignidad asombrosa.

Te dejo aquí mucho amor para ti y para los niños a los que conocí cuando eran muy pequeños en la @libreriamasbernat, en mi librería, donde su padre quería vender aquel libro de poesías", escribía Milá en su instagram.