Si por algo se caracteriza 'El Conquistador del Fin del Mundo' es por lo impredecible que resulta cada episodio, y el programa de este lunes fue una clara señal de ello.
Una semana más, los concursantes del reality más extremo de la televisión tuvieron que enfrentarse a una prueba dura en la que pusieron a prueba todas sus habilidades y su capacidad de resistencia. Tanto fue así que Luisito, integrante del equipo Piche, llegó a perder la consciencia por una hipotermia.
Pese a las tensiones vividas en el equipo de los cóndores la semana pasada, esta vez el equipo capitaneado por Locuras ganó la prueba y se aseguró una semana de tranquilidad en la aventura.
Un duelo de vértigo
En el duelo se enfrentaron Izan, del equipo Puma, y Arantxa y Eneko Van Horenbeke de los Piches. Los concursantes tenían que colgarse de una cuerda y avanzar por ella hasta conseguir tres banderines.
"No puedo. Me da miedo", comenzaba Arantxa, una de las concursantes más duras de la edición. Esto ya auguraba que iba a ser un duelo difícil, más digno de las pruebas que se realizan cuando la aventura entra en su fase final.
Eneko fue el primero en hacerse con el primer banderín, y después parecía que la prueba se le ponía en bandeja al azul después de que Izan cayese de la cuerda y se quedara colgado.
"Venga Arantxa, eres capaz", le decía a la de Zizurkil su ayudante, Azucena. Finalmente, la de Gipuzkoa lo intentó en varias ocasiones, pero el miedo a suspenderse en altura le jugó una mala pasada.
Tuvo varios intentos, pero la exconcursante no tardaba en darse la vuelta: "¿Pero qué te crees, que no quiero hacerlo?", gritaba entre lágrimas y llena de impotencia Arantxa, que era consciente de que si se caía no sería capaz de subir. "Pues ya te recogerán", decía Azucena para animarla.
Eneko también cayó
La prueba dio la vuelta cuando el dos veces campeón del programa también cayó y se quedó, al igual que el rojo, colgado de la cuerda. Arantxa volvió a asustarse por el vértigo que le daba la prueba e Izan aprovechó para trepar por la cuerda y volver a su posición.
Aunque la de Zizurkil fue capaz de salir de la posición de salida y coger su primer banderín, Eneko no fue capaz de subir, y cuando lo intentaba hacía tambalearse a Arantxa: "Me quiere tirar ese cabrón", decía su compañera de equipo, que no fue capaz de conseguir más banderines.
Finalmente, Izan consiguió los tres banderines necesarios para ganar la prueba y asegurarse su permanencia en la aventura. Arantxa desistió por la desconfianza a que su compañero de equipo tratarse de tirarla mientras él intentaba subir la cuerda.
Pese a los intentos de Eneko, no fue capaz de resolver el duelo y los dos Piches se conformaron con un banderín, lo que no les sirvió y les obligó a decir adiós a la aventura.
Así, Eneko Van Horenbeke, uno de los claros favoritos de la edición, y Arantxa, exconcursante y excapitana, tuvieron que despedirse, entre lágrimas, de sus compañeros y poner rumbo de vuelta a casa.
