Ramón Ibarra (Getxo, Bizkaia, 1958) se ha metido en la memoria de los espectadores tras diez años dando vida a Raimundo en la desaparecida serie diaria de Antena 3 'El secreto de Puente Viejo'.

1. Optimista por naturaleza. Desde el momento que eligió ser actor decidió dejar apartado el pesimismo y ver la vida con optimismo. Sabe esperar a que llegue el proyecto adecuado sin perder los nervios.

2. Entre Madrid y Getxo. Dice que una persona es de donde hace el bachillerato. Él hizo la mitad en Euskadi y la otra en Madrid. Siempre ha estado a caballo entre dos territorios, bien por estudios, bien por trabajo.

3. Sus refugios. Burgos es uno de los lugares en los que busca la calma. Pero también es frecuente que se refugie en la Plaza Unamuno de Bilbao y en distitos puntos del Casco Viejo bilbaíno.

4. Alma de idealista. A la hora de matricularse en la universidad optó por Derecho. Tenía grandes expectativas: cambiar el Derecho Penal, el Derecho Civil, incluso revolucionar el Derecho Internacional.

5. Publicidad, un destino temporal. No acabó Derecho, se apunto a Periodismo y terminó la especialidad de Publicidad. Trabajó algún tiempo como publicista.

6. El veneno del teatro. No le iba mal en Publicidad, pero se le había metido debajo de la piel el veneno del teatro. Quería ser un actor sobre el escenario más que delante de la cámara. Al final le ha dado a todo.

7. Querer ser el malvado. Le gustan todos los personajes que ha interpretado, pero en El secreto de Puente Viejo pidió a los guionistas que le metieran tramas con más dosis de maldad, estaba cansado de ser el bueno.

8. Arte en familia. Aunque no de forma profesional, en su familia se respiraba el arte. A su padre le gustaba cantar y vivir el mundo del teatro. Su madre era aficionada a la pintura, pero relegó sus sueños para dedicarse a ser a ama de casa.

9. Su casa es Bilbao. Durante años ha vivido en Madrid de lunes a viernes, pero el fin de semana era sagrado para él. Regresar a casa, Bilbao, y escaparse a los lugares que siempre le hacen sentirse bien.

10. Aficiones. Le gusta estar con amigos, leer, ver a sus colegas haciendo teatro y pasear. Es un enamorado de la música y le encanta la gastronomía.