Donostia. El mundo comunicativo vasco se vio desagradablemente sorprendido ayer al conocer la noticia del fallecimiento de Joxean Lizarribar, presidente del Grupo Berria, editor del diario del mismo nombre, único que se edita íntegramente en euskara. Lizarribar murió a consecuencia de un virus que se le detectó hace unos pocos meses y cuya afección sobre su salud no ha podido superar. Nacido en Altzo hace 62 años, Lizarribar estaba casado y era padre de tres hijos.

Su entrada en el proyecto editorial que representa Berria tuvo lugar en el año 2000, cuando se incorporó al consejo de administración de Euskaldunon Egunkaria. El cierre del diario por orden de la Audiencia Nacional dio lugar al nacimiento de Berria pocos meses después, en junio de 2003. Entonces, Lizarribar fue nombrado presidente de Euskarazko Komunikazio Taldea (EKT), la editora del diario que se ha rebautizado como Berria Taldea.

de la empresa Antes de entrar en el sector de la comunicación, Lizarribar desarrolló una larga trayectoria profesional en el mundo de la empresa. De hecho, cuando entró en el consejo de Egunkaria simultaneó el cargo con la gerencia de la empresa Kelsen de Aduna. Obligado por su actividad profesional viajó por los cinco continentes, adquiriendo un conocimiento del mundo que le llevó a ser requerido por los periodistas para aportar claves sobre distintos asuntos internacionales.

Su vinculación con la cultura vasca, no obstante, es antigua. Lizarribar fue dantzari en su juventud en el grupo Argia, y fue en esa época cuando entabló amistad con el antropólogo y folklorista Juan Antonio Urbeltz mediante el que contactó con el colectivo Ez dok hamairu.

Su fallecimiento se produce en vísperas de que Berria inicie los actos para conmemorar el décimo cumpleaños. En una entrevista que concedió en los albores del nacimiento del diario euskaldun, Lizarribar confesó que no pudo negarse al ofrecimiento para ser el presidente de su consejo de administración.