Ucrania se prepara para repelar una posible gran ofensiva rusa y, a la vez, recuperar territorios ocupados, entre el agradecimiento a la ayuda militar de sus aliados occidentales y la frustración ante la indecisión alemana para entregar los tanques Leopard 2. El “No habrá tanques” emanado de la reunión del viernes en la base estadounidense de Ramstein (Alemania) contrasta con otras ideas expresadas ahí, mientras se perfila una gran ofensiva rusa y una oportunidad para reforzar el ejército ucraniano, opina Olga Tukoriuk, analista política ucraniana.

“La decisión de no dar tanques a Ucrania justo cuando la guerra está entrando en su fase crucial, después de que las fuerzas ucranianas consiguieran infligir varias derrotas aplastantes a Rusia, es incomprensible”. Se hace “muy difícil creer en las promesas de apoyar a Ucrania todo el tiempo que haga falta”, añade, en alusión a ese compromiso explícito de los aliados occidentales.

Mientras ambas partes se movilizan para ofensivas a gran escala, la línea del frente se ha mantenido relativamente estable en las últimas semanas, pese a algunos avances ucranianos cerca de Kreminna, en la provincia de Lugansk, y de los movimientos rusos en Soledar, cerca de Bajmut.

Yevgen, un oficial de la Guardia Nacional de Ucrania, afirma que la presión rusa cerca de Bajmut ha sido implacable y que su unidad necesita urgentemente armamento pesado y otros equipos militares.

“Nuestra motivación es muy alta, pero necesitamos tanques, necesitamos más artillería, más lanzacohetes, para evitar que el enemigo se nos acerque tanto y para salvar la vida de nuestros exhaustos soldados”, explica durante una de las raras pausas entre los combates.

La decepción por la indecisión sobre los tanques afecta principalmente a Alemania, cuya autorización es necesaria para que otros países que poseen tanques Leopard 2 puedan entregarlos al ejército ucraniano. En los últimos días se han anunciado varios e importantes paquetes de ayuda militar. Entre ellos, uno de 2.500 millones de dólares de EEUU y otro de 1.000 millones de Alemania.