El Parlamento Europeo aceptó ayer que ciertas inversiones en plantas nucleares y en centrales de gas para generar electricidad se consideren sostenibles, como propone la Comisión Europea. Con 328 en contra , 278 votos a favor y 33 abstenciones no prosperó la objeción a las futuras reglas de la llamada taxonomía, que pretende orientar las inversiones financieras en la Unión Europea (UE) hacia actividades económicas sostenibles, que precisaba mayoría absoluta de síes.

Al margen de este posicionamiento de la Eurocámara, el Consejo de la UE, que representa a los Estados miembros y es el otro colegislador en la UE, aún puede rechazar el enfoque del Ejecutivo comunitario si antes de la medianoche del 11 de julio se oponen el 72% de los países (20 de 27) y estos representan al menos al 65% de la población de la Unión Europea (unos 290 millones de personas). Si el Consejo no objeta, quedará aprobada la clasificación diseñada por la Comisión para orientar las inversiones futuras que considera “sostenibles” las centrales nucleares con permiso de construcción antes de 2045 y las plantas de gas que emitan menos de 270 gramos de CO2 por kilovatio hora hasta 2031 o menos de 100 gramos en el conjunto de su vida útil.

No obstante, según indicaron a Efe fuentes europeas, no parece que entre los países se esté conformando una mayoría de bloqueo contra la propuesta, que rechazan países como España, Austria, Luxemburgo o Dinamarca pero que resulta cómoda para Francia, Alemania y muchos países del norte y del este de la UE.

Futuras inversiones

La taxonomía, que no tiene aplicación práctica inmediata, es un conjunto de clasificaciones que pretenden orientar las futuras inversiones financieras en la transición ecológica, que en este caso afectan a la energía pero que también se irán desplegando en sectores como el forestal, el transporte o la agricultura.

En el debate previo a la votación en la Eurocámara, celebrado la víspera, la comisaria europea de Servicios Financieros, Mairead McGuinness, apeló al “pragmatismo y realismo” de la cámara porque “hay países que van a necesitar el gas en una fase de transición”. “Nuestra taxonomía apunta a las renovables como prioridad (...). Pero también hay que ser realistas: hay que aceptar que vamos a tener que invertir en gas y nuclear en una fase transitoria”, dijo la política irlandesa.

El gas libera CO2, pero menos que otros hidrocarburos como el carbón, muchos lo consideran imprescindible para la transición de la UE hacia una economía descarbonizada en 2050. La energía nuclear genera inquietud en seguridad o de gestión de residuos radiactivos, pero apenas emite dióxido de carbono.

debate desde hace años

La Comisión Europea, que se define como tecnológicamente neutral, postergó durante años su decisión sobre esas dos fuentes de generación hasta que a inicios de 2022 alumbró un texto al que se opusieron varios comisarios y que también criticó la plataforma de expertos independientes en finanzas sostenibles que asesora al propio Ejecutivo. Pero el Ejecutivo considera la propuesta “realista”.

No obstante algunos países como Luxemburgo o Austria se plantean llevar la taxonomía ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea. – Efe

Voto del pnv

Izaskun bilbao mostró su apoyo

lll Condiciones especiales. La eurodiputada del PNV Izaskun Bilbao mostró su apoyo a declarar el gas y la energía nuclear como fuentes preferentes para completar el suministro mientras las renovables no lo garanticen al 100%. Según informó la formación jeltzale en un comunicado, la decisión se adoptó debido a “las circunstancias excepcionales que se han creado en el mercado de la energía tras la invasión de Ucrania que obligan a adaptar el plan previsto sin esa circunstancia para abordar la transición energética”. Además, puntualizaron que esta decisión “no solo no anula los objetivos del pacto verde y la ley europea del clima, sino que es la única manera realista de cumplirlos”.

La cifra

328

votos en contra, por 278 a favor y 33 abstenciones. Con este resultado no prosperó la objeción a las futuras reglas de la taxonomía, que pretende orientar las inversiones financieras en la Unión Europea hacia actividades económicas sostenibles.

Nuevo plazo

Otra opción de rechazo.

Aún se puede rechazar el enfoque del Ejecutivo comunitario si antes de la medianoche del 11 de julio se oponen el 72% de los países (20 de 27) y estos representan al menos al 65% de la población de la Unión Europea (unos 290 millones de personas).

Von der Leyen

Recursos necesarios. La jefa del Ejecutivo comunitario, no obstante, se ha mostrado “profundamente convencida” de que el bloque necesitará invertir en plantas nucleares y en centrales de gas para acometer su transición energética y desprenderse de los combustibles fósiles de Rusia.

En contra

Protesta de los ecologistas. Las organizaciones ecologistas lamentaron que el Parlamento Europeo aprobara la propuesta de calificar como taxonomía verde a la energía nuclear y al gas, algo que consideran un “desastre” climático y un “atraso” para la transición energética.