La organización por la libertad de información FragDenstaat va a denunciar al Parlamento Europeo ante el Tribunal General de la Unión Europea por no revelar en qué ha usado sus dietas para gastos generales, 4.778 euros mensuales, un diputado griego condenado por dirigir la organización criminal Amanecer Dorado y promover actos violentos.

En un comunicado este martes, la organización aseguró que peleará en los tribunales la publicación de la información sobre para qué ha usado esta dieta adicional al sueldo el eurodiputado Ioannis Lagos, encarcelado en 2021 tras una sentencia judicial en Grecia que declaró a Amanecer Dorado, el partido neonazi griego, una organización criminal.

Pese a esta sentencia, afirma el grupo, Lagos "nunca dejó de tener acceso a los fondos públicos a los que tienen derecho los eurodiputados y sus asistentes" y declaró desde la cárcel que reclamaría "todo lo que le corresponde como eurodiputado electo" y "cumpliría con sus funciones en la medida de lo posible".

Para la organización, la situación plantea la pregunta de "si se ha usado dinero público para perpetuar actividad delictiva o para organizar una fuga de una condena penal", una cuestión que "solo puede responder el Parlamento Europeo", quien se niega a hacerlo alegando que el uso de estos fondos y los gastos de los eurodiputados son "datos personales".

Según FragDenstaat, desde la fecha de su condena hasta el levantamiento de su inmunidad (siete meses) Lagos "reclamó numerosos gastos, ninguno de los cuales ha accedido a publicar el Parlamento, que afirma no ver el interés público en hacer transparente esta información".

Los gastos de los parlamentarios

La llamada dieta de gastos generales sobre la que esta organización reclama una mayor transparencia es la que se destina a cubrir gastos derivados de la actividad parlamentaria, como alquiler y administración de oficinas, gastos de teléfono y suscripciones, actividades de representación, o compra y mantenimiento de equipos informáticos y teléfonos.

Los 4.778 euros mensuales máximos que pueden reclamar los diputados se reducen a la mitad si faltan de forma injustificada a la mitad de las sesiones plenarias de un año parlamentario (de septiembre a agosto), que sería el caso de Lagos durante este curso por estar en la cárcel desde mayo del año pasado.

Fuentes parlamentarias recuerdan que un eurodiputado no pierde su escaño hasta que las autoridades de su país, en este caso Grecia, notifican a la Eurocámara una inhabilitación, y que mientras un diputado tenga ese cargo tiene derecho a su salario y dietas, aunque algunas no llegan a transferirse si el diputado no está viajando y haciendo gastos atribuibles a su trabajo.

En el caso de las dietas para gastos generales, los eurodiputados pueden, de manera voluntaria, publicar cuánto dinero reclaman y en qué lo gastan, algo que sólo hace un pequeño porcentaje de los miembros.

"Incluso siendo un neonazi convicto que cumple una pena de cárcel por actividades delictivas, a Lagos se le permite recibir y utilizar fondos públicos para llevar a cabo su actividad. Esto, por sí solo, debería considerarse alarmante e inaceptable, por no hablar del hecho de que el uso de estos fondos es un secreto protegido por el Parlamento Europeo", denuncia FragDenstaat.

Fuentes parlamentarias consultadas por Efe apuntan a que existe un grupo de trabajo interno dedicado a reformar las normas de transparencia de estas dietas, pero reconocen resistencia interna de los propios miembros de este grupo a establecer nuevas obligaciones de rendición de cuentas sobre gastos.