de entrada, parece una pregunta de perogrullo. Seguro que casi todos pensamos que todos los agentes económicos y sociales implicados van a contestar que sí, que claro, que faltaría más?. Y es lógico pensar así puesto que, empezando por la patronal Confebask y por las centrales sindicales ELA, LAB, CCOO y UGT, parece que han dejado claro que esto es así, que quieren un marco propio y regulado de relaciones laborales donde la negociación colectiva cobre una vital importancia.
Sin embargo la realidad contradice la apariencia. Hace unos pocos meses se firmó un Acuerdo Marco de Hostelería para blindar la negociación colectiva de este sector y ahora parece que tanto CCOO, UGT y CEOE están dispuestas a impugnar dicho acuerdo sólo por criterios legales, sin pararse en pensar que ello perjudica claramente a los trabajadores y trabajadoras del sector en Euskadi. Parece que impera más la necesidad de aparentar y figurar en un “a ver quién es el más fuerte” que en el auténtico objetivo que el de mirar por el bien la sociedad. Esperemos que en este caso Confebask, socia de la CEOE, se pronuncie sobre este aspecto y solicite a la CEOE que se inhiba de esta posibilidad. Esperemos también que tanto UGT como CCOO hagan lo propio con sus respectivas confederaciones si quieren seguir siendo parte en la Mesa de Diálogo Social de Euskadi.
Otra realidad: también se firmó el Acuerdo Interprofesional de Euskadi hace unos pocos meses para blindar la negociación colectiva en su conjunto frente a la inminente injerencia de los acuerdos estatales desde que la legislación de Zapatero, y posterior de Rajoy, con sus reformas laborales posibilitaran esta situación. La única manera de tener un resquicio legal para que los convenios de Euskadi tuvieran preferencia aplicativa frente a los estatales era precisamente la firma de citado acuerdo. Sin embargo, nada se puede hacer o de nada sirve este acuerdo si las partes intervinientes no asumen dicho compromiso facilitando y propiciando la negociación colectiva en sectores y provincias donde llevamos sin convenios más de 15 años en muchos casos, y donde el poder adquisitivo de la mayoría de los vascos y vascas ha decaído en más del 30%. Y se está viendo claramente, cada vez más, que existen organizaciones empresariales que no desean que esto se mueva impidiendo, como está ocurriendo en Gipuzkoa, la constitución de mesas de negociación alegando razones jurídicas que nunca han sido objeto de discusión en anteriores ocasiones. En este caso, Confebask y sus asociaciones confederadas tienen una ocasión de oro para demostrar que el Acuerdo Interprofesional que han firmado lo han firmado de verdad, para que existan convenios, para que se actualicen y dignifiquen los que llevan tantos años en la esquina esperando que esta recesión que parece tocar a su fin permita de una vez por todas retomar la senda de la negociación colectiva dentro del marco autónomo que algunos deseamos para Euskadi.