Una vivienda con balcón, terraza o jardín es una opción excelente, ya que te permite pasar momentos muy agradables al aire libre. Tomar un café, leer un libro o escuchar música tienen un encanto especial si los disfrutas en tu rincón favorito al solecito del invierno o en una buena sombra en los días calurosos del verano. 

Para que te sientas a gusto es importante que el entorno sea acogedor. Mantener el espacio limpio y ordenado y contar con muebles cómodos y prácticos es esencial para hacer de ese lugar tu refugio de paz y tranquilidad.

Sin embargo, siempre habrá algo o alguien dispuesto a perturbar esa paz. En este caso hablamos de las aves, pajarillos o palomas que revolotean por el exterior de tu casa y que muchas veces se posan y te dejan un recuerdo en forma de excrementos

Más allá de la molestia de tener que limpiarlos existe el riesgo de que las superficies resulten dañadas y, lo que es peor aún, pueden contener compuestos o virus patógenos peligrosos para los humanos y transmitir enfermedades. Aunque los expertos consideran que el riesgo de infección es bajo, es importante tomar cartas en el asunto cuanto antes.

Para ahuyentar a estos incómodos visitantes, tienes numerosas opciones como colocar barreras físicas, como alambres o redes; repelentes visuales, como objetos reflectantes o móviles; repelentes auditivos, que imitan el sonido de depredadores, o repelentes olfativos, como el vinagre, la menta o la pimienta.

Un gorrión posado en el brazo de un sillón en una terraza. Pixabay

Papel de aluminio

Si buscas una solución rápida, sencilla, barata, efectiva y en la que los animales no sufran ningún daño, hay un producto que está presente en casi todos los hogares y que te puede ser de gran utilidad. Se trata del papel de aluminio, también conocido como papel albal o papel de plata, y su versatilidad permite desde los usos más cotidianos hasta los más ingeniosos.

Este papel metalizado es desde hace años un imprescindible en la cocina y al ser muy resistente al calor, a las roturas y a los cambios de temperatura, es ideal tanto para cocinar, conservar los alimentos, envolverlos o guardar las sobras de comida.

Pues bien, junto a estos usos tradicionales tiene otros más curiosos y sorprendentes. Uno de ellos es su capacidad de ahuyentar a pájaros y palomas, cuyos excrementos, al contener ácidos corrosivos, pueden causar estragos en tu vivienda.

Para conseguir el efecto deseado solo tienes que colocar una generosa capa de papel de aluminio a lo largo de la barandilla del balcón o de la terraza. El reflejo del sol contra el aluminio creará un efecto visual que resultará muy molesto para las aves, las disuadirá de posarse y las espantará. 

Rollo de papel de aluminio.

Cómo limpiar los excrementos

- En superficies sólidas. Retira con un cepillo o una escoba toda la cantidad de excremento que puedas. Pasa sobre la superficie un trapo humedecido en agua tibia con vinagre de limpieza disuelto a partes iguales. Si es un material resistente, nunca sobre yeso ni madera, puedes utilizar agua a presión.

- En la ropa. Los excrementos son más fáciles de limpiar sobre la tela cuando están secos. Cepilla la mancha y mete la prenda a la lavadora. Si han dejado cerco, frota la mancha con cuidado con vinagre de limpieza antes de meter la ropa a la lavadora.

- En muebles de exterior. Retira la mayor parte con un cepillo o con un trapo. Después elimina los restos con agua jabonosa usando el lado suave de una esponja. 

- En textiles de exterior. Si las aves han hecho blanco en el toldo o en los cojines, cepilla la tela y métela a la lavadora. Si esto no es posible, trátala con agua tibia y vinagre de limpieza, enjuágala con agua limpia y déjala secar al sol.