La Ertzaintza ha detenido a 5 jóvenes y ha abierto diligencias como investigados a otros 24 por participar en una riña tumultuaria ocurrida tras un partido de fútbol celebrado este domingo en el barrio bilbaíno de Irala.

En la pelea se emplearon armas blancas y objetos "peligrosos", por lo que varias personas sufrieron lesiones y dos de ellas tuvieron que ser trasladadas al Hospital de Basurto, según ha informado este lunes el departamento de Seguridad.

Al parecer, la riña se desató tras un partido fútbol disputado entre grupos de jóvenes de Eibar y Bilbao, que se habían citado previamente por redes sociales.

Varias patrullas de la Ertzaintza se trasladaron al lugar y detuvieron a los jóvenes, de entre 15 y 19 años, por sendos delitos de lesiones.

Violencia en el deporte

El partido organizado por estos jóvenes a raíz del que se desató esta riña tumultuaria con objetos "peligrosos" no era un encuentro federado como los ha habido estas últimas semanas en el fútbol vasco. Hace menos de un mes, el partido de Primera Cadete Masculina entre el Kostkas y el Antigua Luberri derivó en una pelea a puñetazos en Donostia la que se vieron implicados varios jugadores, espectadores, y algunos de los padres de los futbolistas, sin que en este caso llegaran a producirse heridos graves.

Durante el choque ya se habían vivido varios momentos de tensión. Con el 2-2, un jugador del Antigua Luberri puso las manos sobre la cara de un rival, empujándole, lo que dio pie a una pequeña tangana. El incidente se saldó con una sanción arbitral de tarjeta amarilla para el agresor, cuyo entrenador sustituyó del césped de inmediato.

Tras el pitido final, en medio de la tranquilidad general, un rifirrafe entre dos jugadores hizo que varios jóvenes que se encontraban en la grada, probablemente amigos de uno de los futbolistas del Kostkas, se dirigieran hacia un jugador del Antigua Berri, propinándole puñetazos y patadas.

Semanas atrás, el Ayuntamiento de Urnieta y el club de fútbol local también reprobaron en público la actitud de parte de la grada, apelando "a las conductas de respeto y civismo que faciliten la buena convivencia"; hechos que sucedían pocos meses después de que en Aretxabaleta tuvieran que hacer frente a otro grupúsculo cuya actitud desembocó en multas contra el club de Debagoiena.

“El problema no es del fútbol, está en la sociedad y hay que hacerle frente”. Así de rotunda se expresaba la presidenta de la Unión Deportiva Aretxabaleta (UDA), Agurtzane Elkoro, cuando se refirió de los desagradables y lamentables episodios en varias gradas de otros tantos campos guipuzcoanos, mientras se disputan los partidos del equipo juvenil de Liga Vasca del club aretxabaletarra. “Nueve, puto maricón”, “cinco, gordo”, “seis, adoptado”… son algunos de los gravísimos insultos que el grupo de jóvenes profería a jugadores, árbitros y al público que les increpa por sus deplorables actitudes.