La Asociación de madres y padres Altxa Burua del instituto Antigua-Luberri de Donostia ha podido constatar que el retraso en el acceso al móvil de los adolescentes que acuden a este centro educativo ha mejorado el ambiente entre los jóvenes. Así la han hecho saber en el balance que recoge los datos sobre el uso de los smartphones llevados a cabo por la asociación Altxa Burua.
En este sentido, las cifras hablan por sí solas. Siete de cada diez estudiantes de 12 años (75%) no tienen móvil y, además, se han comprometido a llegar hasta 3º de la ESO (DBH) sin el dispositivo, según el comunicado de la asociación.
Esta entidad destaca que la mayoría de los estudiantes de los dos primeros cursos de la Educación Secundaria Obligatoria, correspondiente a la franja de edad de entre 12 y 14 años, "no tiene móvil". En el caso concreto de 2ª, es la mitad del alumnado, por lo que la media en esos dos primeros años se sitúa en el 61% del total de estudiantes no cuenta con teléfono smartphone.
Son unos datos que Altxa Burua Luberri destaca porque "sacar los smarphones de las relaciones entre los adolescentes implica mejorar las relaciones personales" y, en este sentido, han recordado que los movimientos que reclaman el retraso de acceso al teléfono se han extendido a lo largo de todo el mundo.
Propuestas de Altxa Burua
El movimiento asociativo de padres y madres Altxa Burua ha tomado fuerza en nuestra sociedad en los últimos meses. Entre sus demandas, las familias reclaman priorizar el aprendizaje analógico, con el objetivo de que leer en papel y escribir a mano vuelva a ocupar el centro del sistema de aprendizaje. En este sentido, el uso de herramientas digitales se volvería a convertir como era hasta hace pocos años en un recurso "complementario y sostenible".
Regresar a la lectura en papel y a la escritura a mano es una de las cinco propuestas que Altxa Burua ha remitido a los centros educativos, en un documento en el que se sugiere "un calendario de consumo digital" y un enfoque de la "lectura y escritura analógica".
Esta guía de trabajo es fruto del análisis que han realizado durante el último año psiquiatras, psicólogos, investigadores, informáticos, docentes y directores de colegio de la digitalización del sistema educativo vasco, aportando diferentes miradas, desde una perspectiva de salud, de privacidad y pedagógica. Todo ello ha quedado plasmado en un extenso informe de 400 páginas sobre el proceso de digitalización del sistema educativo vasco.
