La Diputación de Gipuzkoa y el Ayuntamiento de Irun han firmado este martes el último paso para dar por concluida la puesta en marcha de la Ronda Sur en cuatro años. Ambas instituciones han cerrado el convenio que permitirá la construcción del semienlace de Arbes y la nueva rotonda en Azken Portu, lo que será “un paso importante para la mejora de la movilidad urbana en el Bidasoa”.
Así lo han anunciado en rueda de prensa la diputada general, Eider Mendoza; el diputado de Infraestructuras Viarias y Estrategia Territorial, Felix Urkola; y la alcaldesa de Irun, Cristina Laborda, tras la firma del convenio, que permitirá iniciar la redacción del proyecto constructivo del enlace completo Arbes-Oinaurre en las AP-8 y su conexión con la ciudad irundarra. “La Ronda Sur es una demanda histórica que por fin estará culminada y que creará un anillo de circunvalación en Irun que mejorará el día a día de los irundarras”, ha adelantado Laborda.
El convenio firmado, por un lado, contempla la creación de un nuevo semienlace en Arbes que conectará con Behobia y con Oinaurre gracias a un vial de 2,1 kilómetros. Una vez salgan a licitación, los trabajos de redacción se desarrollarán durante el próximo año con el objetivo de iniciar las obras en 2027. El plazo de ejecución, por su parte, es de año y medio, por lo que se espera que en 2029 la Ronda Sur esté finalizada.
Por otro lado, también se trabaja en la redacción del proyecto de la nueva rotonda en Azken Portu para sacar a licitación la ejecución de los trabajos a principios del próximo año. La construcción de esta rotonda permitirá todos los movimientos entre la calle Artiga y la carretera GI-636.
Todos los trabajos contemplados en el convenio, con actuaciones en la N-638 y la GI-636, además de en Amute, Mendelu y Plaiaundi, cuentan con una inversión estimada de 50 millones de euros.
Estrategia global
Para la diputada general, este proyecto forma parte de “una estrategia global para transformar las conexiones, mejorar la movilidad y ordenar el tráfico en uno de los puntos con mayor intensidad del territorio”. “Se han hecho grandes esfuerzos por mejorar las carreteras de Gipuzkoa y ahora buscamos una mayor comodidad y seguridad”, ha apuntado.
Asimismo, ha puesto como ejemplo la repercusión que tienen hechos como las protestas de los ganaderos en Francia sobre la circulación en el Bidasoa. “Se trata de un problema que tenemos desde hace tiempo sobre la mesa y al que solo se le puede dar solución desde la cooperación institucional”, ha agregado.