La XXIII edición del Encuentro de Familias de Acogida de Gipuzkoa ha reunido a más de 150 familias y profesionales vinculados a la protección infantil este sábado, ante la "urgencia de nuevas familias" para los cerca de 90 menores que están a la espera de una familia en el territorio.
Según ha indicado la Diputación Foral de Gipuzkoa en un comunicado, la jornada ha puesto el foco en la mirada relacional del acogimiento bajo la pregunta "¿Quién cuida a quién?" y ha subrayado el papel fundamental de las familias de acogida en el bienestar de los menores.
Actualmente, la Diputación Foral de Gipuzkoa tutela a 815 menores, de los cuales 489 residen en centros y 326 en familias de acogida. Cerca de 90 niñas, niños y adolescentes permanecen a la espera de una familia, motivo por el cual la Diputación ha reiterado la urgencia de incorporar nuevos hogares a la red de acogimiento.
La diputada de Cuidados y Políticas Sociales, Maite Peña, ha inaugurado el encuentro destacando que Gipuzkoa es "una comunidad solidaria y responsable" comprometida con la protección de los más vulnerables, ha agradecido el "extraordinario trabajo" de las familias de acogida y de las asociaciones que trabajan en este ámbito, y ha recordado que el acogimiento es una medida de protección cuyo objetivo es proporcionar estabilidad, afecto y bienestar, respetando "la historia de cada menor".
Durante la jornada se ha puesto en valor el acogimiento familiar como un acto de generosidad y responsabilidad social, si bien se ha reconocido que la red actual sigue siendo "insuficiente" para atender todas las necesidades del territorio.
En el acto se ha reconocido el trabajo de las asociaciones Beroa, Lauka -Servicio de Apoyo Técnico al Acogimiento Familiar- y Agintzari -Programa de Acogimiento Familiar Especializado-.
Tres modalidades
La Diputación Foral de Gipuzkoa ofrece tres modalidades de acogimiento: de urgencia, con una duración máxima de seis meses para situaciones que requieren una evaluación inmediata; temporal, de hasta dos años, dirigida a menores cuyas familias de origen tienen posibilidades de recuperación; y permanente, cuando no se prevé un retorno a corto plazo.
Una vez alcanzada la mayoría de edad, la convivencia puede prolongarse si ambas partes así lo desean, con apoyo en la transición a la vida adulta.
Las personas interesadas en obtener información sobre el acogimiento familiar pueden contactar con la Diputación a través del teléfono 682 554 433 o consultar la web institucional.