La agencia de viajes de Errenteria que varias personas han acusado de haberles “estafado” cerró el pasado 23 de mayo por insolvencia, por lo que será el seguro el que se encargará a partir de ahora de reembolsar el dinero a los clientes afectados. Así lo indica a este periódico la responsable del negocio, asegurando que hay en torno a 20 personas perjudicados con una cuantía que asciende hasta los 50.000 euros y que han sido informados de la situación en todo momento.
“No está siendo fácil porque llevaba 20 años de agencia y muchos son clientes conocidos, pero desde la pandemia la situación económica no era buena y solo ha ido a peor”, ha asegurado la propietaria del local, que ha reconocido que en agosto del pasado año el delicado estado del negocio ya le llevó a devolver varías cuantías a aquellos clientes que se lo pidieron. “Desde entonces, he intentado darle la vuelta, pero por una serie de factores, y seguramente también por una mala gestión, no he sabido reconducirlo”, asevera, asegurando que los clientes que se han quedado sin viaje y sin dinero son solo los correspondientes a las últimas semanas.
De este modo, explica que hay en torno a 20 personas afectadas que habían contratado viajes a diversos destinos, desde estatales hasta cruceros y viajes internacionales como Grecia y Nueva York, y que la cuantía total se situaría en torno a los 50.000 euros. Estas personas, asegura, recibirán el reembolso a través de la póliza del seguro una vez que se tramite que el impago ha sido fruto de un cierre por insolvencia.
“No he desaparecido ni he huido y estoy localizable en todo momento si me llega una notificación. No es que me haya llevado el dinero. Puedo entender que haya un sentimiento de estafa, pero eso hay que demostrarlo”, indica, señalando que ha tenido que aportar el historial de su cuenta corriente para verificar que no ha habido ningún desvío del dinero o una compra particular. Asimismo, asegura haber informado a las personas afectadas de la situación en todo momento, bien vía correo electrónico bien vía WhatsApp.
"Entiendo que se hayan asustado"
A pesar de ello, la propietaria ve como “muy respetable” la decisión de los clientes de juntarse bajo una misma plataforma y estudiar tomar medidas judiciales conjuntas. “Entiendo que se hayan asustado y la OCU, además, anima a denunciar siempre, por lo que es normal”, añade, recordando, eso sí, que las denuncias deben presentarse a través de lo civil o de consumo.
“No estoy condenada ni juzgada y puedo demostrar que no he desviado dinero ni me he quedado con nada”, explica la dueña, visiblemente afectada por haber “decepcionado” a clientes con los que ha trabajo durante muchos años. “No es nada agradable porque es mucho tiempo. Al final son sentimientos encontrados y no lo estoy pasando nada bien”, reconoce.
No obstante, según la responsable del negocio ha leído "cosas que no son ciertas” y mucha gente se ha incorporado a la denuncia pública a pesar de haber realizado su viaje. “He pasado un año muy difícil y queremos que se pare cuanto antes, así que no puedo estar denunciando lo que dice todo el mundo”, agrega, repitiendo que en caso de haber sido víctimas de una estafa deberán demostrarlo en los juzgados.
Decisiones conjuntas
Las personas afectadas, por su parte, se reunieron el pasado viernes para organizarse y estudiar posibles acciones legales de manera conjunta. Para ello, además, han creado un grupo de WhatsApp y prevén una nueva reunión esta semana.
Este periódico se ha puesto en contacto con varios de estos clientes damnificados, pero han declinado realizar nuevas declaraciones a la espera de que tomen una decisión entre todos.
Desde la Ertzaintza, por último, han confirmado una denuncia registrada en las dos últimas semanas relacionada con el cierre de este negocio, mientras que desde Kontsumobide se han trasladado una serie de recomendaciones ante situaciones como esta.