La carestía de la vivienda y el problema de falta de soluciones habitacionales que está provocando semejante inflación dibuja en Gipuzkoa un panorama más preocupante si cabe del que ya tiene hoy, ya que el nuestro se ha convertido en el último año en el territorio de Euskadi que menos licencias ha concedido para la construcción de vivienda nueva para uso residencial.
La previsión es que con las 63 licencias de nueva edificación para uso residencial autorizadas en un año, entre abril de 2024 y marzo de 2025 por los 88 municipios de Gipuzkoa se puedan levantar únicamente 789 viviendas. Y todo ello para una población que supera ya las 732.000 personas. En Araba se han autorizado 379 más: un total de 1.168 para 339.000 habitantes.
No salen las cuentas. Se calcula que en Gipuzkoa se necesitan más de 21.000 pisos para cubrir las necesidades de primera vivienda de sus ciudadanos y ciudadanas: unos 24.000 demandantes entre 18 y 44 años que ya lo están estudiando, y 8.000 más que no pueden ni planteárselo al carecer de recursos. Pues bien, las 789 viviendas autorizadas en el último año, sumadas a las 1.242 del año anterior, apenas alcanzan las 2.000, por lo que los pisos de segunda mano y el alquiler se presentan como las principales soluciones a corto y medio plazo. Pero el mercado aprieta y los precios se disparan.
Tendencia a la baja
La tendencia es “a la baja en nuestro territorio” si cogemos como referencia el periodo postpandemia. En concreto, de un año para otro se han dejado de autorizar 453 viviendas nuevas. La caída es del 36,5%.
No sirve de consuelo la importante caída experimentada también en Bizkaia (-19%), donde las cifras absolutas de nueva vivienda prevista (2.095) siguen siendo muy superiores a las de Gipuzkoa y la ratio por habitante es mayor, si tenemos en cuenta la población de ambos territorios.
Estos y otros datos han sido obtenidos de la Estadística sobre Edificación y Vivienda (EDYVI) del primer trimestre de 2025. Las cifras de enero, febrero y marzo en Gipuzkoa son inquietantes, y el propio Gobierno Vasco, autor del mismo, advierte de las variaciones que se producen de un trimestre a otro. Sin embargo, las cifras anuales, que “ofrecen una foto dinámica bastante real de la situación”, según reconoce el propio informe, siguen arrojando cifras preocupantes. La comparativa con Araba es la más dolorosa en ese periodo anual: los ayuntamientos alaveses han concedido más licencias para obra nueva que un año antes (+3,9%).
Hay que tener en cuenta que la previsión de vivienda nueva autorizada en Gipuzkoa en ese periodo de un año entre abril de 2024 y marzo de 2025 representa el 19,47% de todo Euskadi, cuando nuestro territorio tiene un peso de un tercio sobre el total de la CAV en términos económicos. Araba autorizó el 28,8% de toda la vivienda nueva en ese periodo anual y Bizkaia, el 51,7%.
Rehabilitar y demoler
El informe EDIVY recoge todas las estadísticas de obra mayor autorizadas por los ayuntamientos vascos, que también pueden ser de rehabilitación o demolición, o incluso de construcción de edificios no residenciales.
En total, se han concedido un total de 934 licencias de obra mayor en el primer trimestre de 2025. Esta cifra supone que se han concedido 23 licencias menos que las concedidas el trimestre anterior (-2,47% en términos relativos) y 31 menos (-3,2%) que las concedidas en el primer trimestre de 2024.
Más de la mitad de esas licencias (52,0%) se conceden en el territorio histórico de Bizkaia (486 licencias). En Gipuzkoa se conceden 227 licencias de obra mayor (el 24,3% del total de la CAV) y en Araba se contabilizaron 221 (23,7% del total), en el primer trimestre de 2025.
La mayoría de las licencias de obra mayor, como suele ser habitual, se vinculan a obras de rehabilitación que superan el 88,3% en la CAV. Y Gipuzkoa es donde mayor peso tiene la rehabilitación en términos generales, aunque se haya registrado un descenso sobre el periodo anterior.
Las licencias destinadas a nueva construcción suponen el 10,3%, y queda el restante 1,4% asociado a las licencias de demolición.
Por territorios, Gipuzkoa mantiene su tendencia a la baja detectada en el trimestre anterior (aunque algo matizada en éste) y Bizkaia ofrece en el último año una serie de dientes de sierra que alterna crecimientos con decrecimientos en los cuatro últimos trimestres. Sólo en Araba se produce un cierto crecimiento que rompe la tendencia negativa precedente.
En cuanto a Gipuzkoa, en el primer trimestre de 2025 se han autorizado un total de 227 licencias de obra mayor. 202 son de rehabilitación (89%); 19 de nueva planta o nueva construcción (8,4%) y seis de demolición (2,6%). Subieron las de nueva planta en relación al trimestre anterior, el último de 2024, pero bajaron en casi la misma proporción con respecto al primer trimestre de 2024, es decir, en el periodo interanual.
En definitiva, en el primer trimestre de 2025 caen las concesiones de licencias de obra mayor en Euskadi por la caída observada en Bizkaia y Gipuzkoa que no puede compensar el crecimiento de Araba.