Laugarren Euskaraldia hasiko da bihar. El jueves arrancan once días donde todo el mundo –euskaldun o no– está invitado a vivir el euskera de forma activa. El objetivo de este ejercicio colectivo es cambiar los hábitos lingüísticos para hablar más en euskera y sacudir nuestras inercias a la hora de elegir el idioma. Miles de personas organizadas en torno de los comités locales de todo Euskal Herria han trabajado intensamente los últimos meses para que el mensaje llegue a la ciudadanía y que la propia dinámica pueda realizarse en todo el territorio, pueblo a pueblo. El lema de este año es Elkar mugituz egingo dugu (Entre todos lo haremos posible).

Las chapas belarriprest y ahobizi seguirán siendo uno de los elementos nucleares de esta iniciativa sociolingüística. En las tres ediciones anteriores ha quedado demostrado que miles y miles personas a lo largo y ancho de Euskal Herria han cambiado sus hábitos lingüísticos y han dado el salto al euskera gracias a Euskaraldia: en la familia, con las amistades, en los lugares de trabajo o en las relaciones con desconocidos. El estudio realizado tras la tercera edición mostró, entre otras cosas, que los que hablaban en euskera en todo momento con quienes sabían euskera eran el 63,9% antes del ejercicio y el 78,9% una vez finalizado el mismo y que la proporción durante el mismo llegó al 85,9%.

Por otro lado, esta investigación apuntaba que quienes solían hablar la primera palabra en euskera eran el 55,8% antes del ejercicio y el 75,9% después, o que quienes mantenían el euskera en las conversaciones bilingües eran el 44,6% antes y el 76,6% después. Por lo tanto, el uso del euskera es más alto después de haber participado en Euskaraldia lo cual representa una ayuda inestimable en el proceso de revitalización del euskera, donde el uso es su principal hándicap. Y es que tres de cada cuatro ciudadanos saben euskera, pero solo el 25% lo usa en su vida cotidiana.

Belarriprest y ahobizi

Sin duda, la chapas y el ánimo proactivo que se experimenta hacia el euskera durante once días favorecen estos cambios. Ya se ha cerrado el plazo de inscripción a través de www.euskaraldia.eus, lo que multiplicará el número de personas con chapas belarriprest (literalmente “oreja lista”), el rol en el que se mete una persona que entiende euskera y anima a cualquiera a hablarle en esa lengua. El rol opuesto , “ahobizi” (literalmente “boca lista”), es el que habla en euskera a todas las personas que lo entiendan. La chapa, por tanto, es un elemento imprescindible ya que muestra una actitud de hablar o escuchar en euskera, lo que reduce considerablemente el estrés lingüístico de la experiencia.

Para celebrar el inicio de Euskaraldia se han organizado un sinfín de actividades en muchos rincones de Euskal Herria. En todas ellas se leerá un texto conjunto y quienes participen se colocarán la chapa a las 19.00 horas. A partir de ahí, habrá danza, música y espectáculos. Hasta la fecha han sido cientos, miles, las organizaciones, empresas e instituciones que ya se han adherido a esta dinámica. Pero lo importante de Euskaraldia es el compromiso individual. Así las belarriprest y ahobizi intentarán, al menos durante semana y media, hablar sus primeras palabras en euskera; y aumentarán las conversaciones bilingües, aquí y allá. Belarriprest le dirá a quien tenga enfrente que hable con él en euskera, y siempre que pueda él también lo hará. Pasaremos once días con la chapa puesta, en la calle, en el trabajo y en el tiempo libre para trabajar más cómodamente en euskera. Además, Bulego es el grupo que pondrá la banda sonora a la cuarta edición de Euskaraldia con la canción Gure Bihotz Taupadak.

Euskaraldia. Es un ejercicio social masivo que busca fomentar el uso del euskera al menos durante una semana y media.

Ahobizi. Esta chapa indica que la persona habla siempre en euskera con la gente que entiende la lengua.

Belarriprest. Este rol indica que la persona que porta la chapa está abierta a que le hablen en euskera (sea euskaldun o no).