Jon Areitio va a cumplir cuatro años en su trabajo de mantenimiento y cuidado de los campos del Club de Golf de Hondarribia y sus instalaciones, pero su sueño siempre ha sido ganarse la vida como ganadero. A día de hoy, en su casa, el caserío Mugarrieta de Hondarribia, una ganadería familiar (desde 1948) dedicada a la producción de carne de vacuno con sello Euskolabel, tienen en él una de las grandes esperanzas para continuar con la actividad ganadera. Jóvenes como él son un activo de valor incalculable en tiempos de dificultades para garantizar el relevo generacional de muchas explotaciones agrarias. El programa Baserritar Misto Profesionala es una nueva puerta de entrada y la Diputación de Gipuzkoa ha presentado este jueves las bases y requisitos, que se publicarán la próxima semana en el Boletín Oficial de Gipuzkoa (BOG).
Jon Areitio es una persona activa en redes sociales. Tiene más de 32.000 seguidores en Instagram, donde comparte su pasión en imágenes. Cualidades que se suman a la capacidad de trabajo propia de quienes ya conocen lo que es el caserío. Y el programa Baserritar Misto Profesionala (Agricultor Mixto Profesional) es para él “una gran oportunidad de poder ganarme la vida con esto”.
Los solicitantes deben tener entre 18 y 55 años, presentar un plan de viabilidad y darse de alta en Agraria
Su empresa ya le ha dado el sí; hasta ahora, cuando el caserío le exigía más trabajo de apoyo, en verano para la corta de hierba, por ejemplo, solía pedir horas de permiso que luego recuperaba. Pero a partir de ahora podrá compaginar ambos trabajos de forma profesional y reglada, de mutuo acuerdo con la empresa que le paga por cuidar los campos de golf, y con el aval y la garantía de la Diputación Foral.
Durante los seis años que contempla el programa Baserritar Misto Profesionala podrá compaginar su trabajo de mantenimiento con el del caserío de forma profesional. Ambos a media jornada (50%), pero confía en que dentro de seis años pueda hacer su carrera al 100% en el caserío.
En ese trayecto hacia su sueño, dispondrá de una ayuda de 60.000 euros por parte de la Diputación Foral de Gipuzkoa. Un impuso para emprender su aventura profesional propia en el sector primario; mientras que la empresa será compensada con 30.000 euros por su contribución y flexibilidad para impulsar esta iniciativa, que no tiene precedentes en Europa.
Evitar el retroceso del caserío
Según ha dicho la diputada general Eider Mendoza esta mañana, el programa Baserritar Misto Profesionala es una aportación pública que para la Diputación es clave si queremos “mantener a futuro toda la aportación económica, social y medioambiental” que realiza el sector agrario y que está en riesgo de retroceso, con serios problemas de relevo generacional.
“Siempre da miedo dejar el trabajo de fuera y dedicarte al caserío”, ha reconocido Jon Areitio, pero “con este proyecto tenemos una seguridad mínima para emprender” el proyecto propio del caserío, que deberá contar con un plan de viabilidad previo, eso sí.
“Yo trabajo en el sector servicios y esta es una gran oportunidad para poder ganarme la vida del caserío en un futuro”
Del sector servicios pasamos a la industria. Aitor Esnaola, ordiziarra y operario de la empresa constructora de ferrocarriles CAF, es otra de las personas que ya está lista para dar el salto. Participar en el programa Baserritar Misto Profesionala evitará tentaciones de abandonar en un futuro próximo la producción de manzana y sidra que lleva a cabo en su caserío.
“Estar al 100% en la en los dos sitios es muy difícil, y a medida que pasa el tiempo se va complicando más, y hay que tomar decisiones"
“Estar al 100% en la en los dos sitios es muy difícil, y a medida que pasa el tiempo se va complicando más, y hay que tomar decisiones; y dejar los manzanales y la sidra al 100% es una decisión que no quieres tomar; por el paisaje, y por todo”, reconoce Esnaola.
Garantizar alimentos y paisaje
Han sido la propia diputada general, Eider Mendoza; acompañada de su diputado de Equilibrio Territorial Verde, Xabier Arruti, los encargados de dar a conocer hoy en rueda de prensa las bases de esta “innovadora iniciativa” y los requisitos exigibles (se plubicarán en el Boletín Oficial de Gipuzkoa la próxima semana) para participar en un “proyecto experimental” que según Mendoza y Arruti exige “un esfuerzo compartido con las empresas”.
“Tenemos un desafío enorme, porque el primer sector le hace una gran aportación a nuestra economía, desde el punto de vista ambiental y también porque ofrece cuidado del territorio y productos de cercanía. Y el reto es que hay falta de relevo generacional”, ha dicho Eider Mendoza: “Más del 78% de las personas que actualmente trabajan en el sector primario en Gipuzkoa tienen más de 50 años”.
Baserritar Misto Profesionala permite a empresas de los sectores secundario y terciario (en ningún caso del primer sector) alcanzar acuerdos voluntarios con sus trabajadores para que estos emprendan un proyecto profesional vinculado al caserío.
“Más del 78% de las personas que actualmente trabajan en el sector primario en Gipuzkoa tienen más de 50 años”.
Según ha explicado Arruti, podrán acogerse a este programa personas trabajadoras de entre 18 y 55 años que tengan una antigüedad mínima de 18 meses en su empresa, y tendrán que darse de Alta en la Agraria de la Seguridad Social y realizar un plan de viabilidad que avale su proyecto.
En el caso de que la persona trabajadora a los seis años no quiera continuar con su proyecto agrario, la empresa contratará de nuevo al 100% a su empleado, ha explicado el diputado de Equilibrio Territorial Verde, aunque “el objetivo del programa es que siguiera en el caserío”.
Arruti ha dicho que la aceptación que ha tenido este programa ha sido buena. Desde que en octubre se hizo un primer anuncio, un total de 300 personas han acudido a las charlas informativas que se han realizado a lo largo del territorio y “80 de ellas han llamado posteriormente mostrando interés por el proyecto”.
Objetivo: 180 personas en seis años
El objetivo, ha dicho, es poder apoyar en esta transición a unas 180 personas en seis años, unas 30 por convocatoria. Arruti ha precisado que de las 80 personas interesadas “que se han puesto en contacto con nosotros, hay algunas que nos dicen que para esta convocatoria no van a llegar. Hay que tener en cuenta que primero hay cumplir una serie de requisitos (entre ellas conseguir la titularidad de la explotación) que es difícil cumplir en un mes.
El diputado de Equilibrio Territorial Verde ha dicho que este programa “va más allá” de impulsar el relevo generacional en el sector primario, porque no se puede delegar “toda la responsabilidad” de “producir alimentos, mantener el paisaje, el medioambiente, y mantener vivo” el agro guipuzcoano en los baserritarras.
"Oportunidad" para las empresas
Arruti ha dicho que este programa es también “una oportunidad que se les ofrece a las empresas para contribuir en el mantenimiento del paisaje y la producción de alimentos de cercanía” y que “puedan hacer esa aportación a través de sus trabajadores”, lo que también contribuye a combatir el cambio climático.
A la presentación, que ha tenido lugar en el Palacio Foral, han asistido los máximos responsables de dos empresa del territorio: Iñaki Gorostidi, de Logikaline, una empresa de servicios de call center y atención al cliente 24 horas situada en Abaltzisketa; ejemplo de un trabajo de oficina, por decirlo de alguna manera. Y Xabier Iturrioz, copropietario de Construcciones Iturrioz de Beasain, quien ha subrayado la conexión existente entre el caserío y la construcción, un trabajo de calle que requiere de “empleados curtidos”.
“Todo nuestro apoyo”
Iñaki Gorostidi ha calificado de “moderna” y “totalmente lógica” esta iniciativa, como herramienta para combatir el abandono del mundo rural, visible y palpable en el paisaje de su propia localidad, Abaltzisketa, donde los pastos y tierras de cultivo han experimentado un gran retroceso en medio siglo.
“Las empresas guipuzcoanas participamos en muchos ámbitos de la sociedad, patrocinando equipos deportivos, por ejemplo, y por qué no también contribuyendo a la mantención de nuestro paisaje y la producción de alimentos. Sabemos que los baserritarras son unos excelentes jardineros que cuidan el territorio, pero cada vez son menos, y creo que tenemos un compromiso con la sociedad”, ha dicho el reponsable de Logikaline.
Flexibilidad por responsabilidad
Gorostidi ha asegurado que impulsar la actividad agraria puede ayudar a las personas trabajadoras a mejorar otras cualidades muy valoradas por las empresas hoy en día, como son la “toma de responsabilidad, la capacidad de resolución de problemas y el escuchar al cliente”, características “muy cotizadas por las empresas” hoy en día, más allá de la formación técnica y académica, que ha calificado de excelente..
Xabier Iturrioz, por su parte, ha señalado que “es importante que le demos flexibilidad a la gente en el trabajo” y ha dicho que esta iniciativa “tiene todo nuestro apoyo”.