Los participantes en la misión Polaris Dawn, que esta semana hicieron historia al completar la primera caminata espacial privada, regresaron ayer a la Tierra. Una transmisión web en vivo mostró el amenizaje de la cápsula Dragon con la tripulación a bordo hacia las 07.40 GMT en la costa de Dry Tortugas, Florida. La misión despegó el martes desde Cabo Cañaveral y marcó también el hito de superar los 1.400 kilómetros de distancia de la Tierra, el viaje tripulado más lejano desde las misiones Apolo hace más de 50 años. Durante su misión en órbita, Dragon y la tripulación participaron en la primera actividad extravehicular (EVA) usando trajes especiales desarrollados por SpaceX, la compañía de Elon Musk
La primera caminata la protagonizaron la especialista Sarah Gillis y el comandante de la misión, el también multimillonario Jared Isaacman. La misión ha realizado 36 estudios de investigación y experimentos de 31 instituciones asociadas, diseñados para mejorar la salud humana en la Tierra, y probaron las comunicaciones basadas en láser Starlink en el espacio.
Los cuatro astronautas pudieron seguir su trayectoria de regreso a través de las pantallas que había dentro de la cápsula, y todo el complejo proceso de amerizaje. La cápsula entró en la atmósfera terrestre después de soportar temperaturas de hasta 1.900 grados a causa de la fricción. El escudo térmico de la parte inferior de la cápsula protegió a la tripulación de estas altas temperaturas. La fricción con el aire empezó a desacelerar la nave, que viajaba a unos 27.000 kilómetros por hora. Minutos antes del amerizaje, la cápsula desplegó cuatro grandes paracaídas. De hecho, el descenso hasta tocar el agua estuvo en todo momento controlado, pasando de orbitar la Tierra a 27.000 km/h a ponerse a una “velocidad de paseo en bicicleta”, como describió el comandante Isaacman.