Recuerdo un trabajo que hicimos con niños, donde les pedíamos que crearan una serie de mensajes o lemas para motivar a la gente a donar sangre y la verdad es que plantearon una frase que creo que es muy gráfica y lanza un mensaje muy claro y directo: mientras tú tienes miedo a donar, otro tiene miedo a morir.

Además, la estadística nos dice que, a lo largo de nuestra vida, tres de cada cuatro personas vamos a necesitar sangre para recuperar nuestra salud o incluso para salvar nuestra vida. Es poco probable que seamos de ese 25% que se libra, pero incluso en ese caso, tenemos que tener la seguridad absoluta de que alguien muy cercano y que realmente nos importa va a necesitar sangre. Creo que esto debe movernos a todos, porque este pequeño gesto de apenas 15 minutos está salvando muchas vidas”. Con estas palabras, Miguel Ángel Vesga, director de Transfusión y Tejidos Humanos, anima a los ciudadanos a seguir donando sangre y plasma. 

Donantes Euskadi

Donar sangre es muy sencillo: basta con acercarse a uno de los puntos fijos de donación o a cualquiera de las unidades móviles. Toda la información sobre la ubicación de todos estos puntos se puede encontrar en la página web www.donantesdesangre.eus y en la app Donantes Euskadi. “Aquí también se ofrece información sobre el proceso de la donación de sangre, la importancia que tiene y cómo están los niveles de sangre actuales en Euskadi. Además, incluye un área privada, a la que se puede acceder con la BakQ de Osakide-tza, que permite ver todo el historial de donación, grupo sanguíneo, carné de donante y también pedir cita para las donaciones de aféresis. Cabe destacar que de cada donación de sangre se obtienen tres componentes sanguíneos: plaquetas, hematíes y plasma”, añade. 

Seguridad

Así pues, cada donación de sangre tiene la capacidad potencial de salvar tres vidas humanas. Hay que añadir los medicamentos que se obtienen del plasma de cada donación, que benefician al menos a otras cuatro personas. La donación de sangre debe ser, dice el experto, un acto cotidiano que dé autosuficiencia, seguridad y que garantice la disponibilidad de los componentes sanguíneos para atender las necesidades de nuestro sistema sanitario

Los hombres pueden donar hasta cuatro veces al año y las mujeres tres, siempre respetando un intervalo mínimo de dos meses entre donaciones. No es fácil mantener un flujo diario de donantes que acudan regularmente a donar sangre. En este sentido, dice el experto, el relevo generacional de los donantes es muy importante ya que la base de los donantes de Euskadi está cada vez más envejecida y es necesario incorporar a los más jóvenes.

Para ello, “hacemos un esfuerzo especial de concienciación sobre todo con la gente más joven. Tenemos campañas específicas de promoción de la donación de sangre en centros educativos, centros de formación profesional, universidad… Y hay que reconocer que la respuesta de los jóvenes es muy positiva. El objetivo para garantizar la suficiencia en todo momento es convencer al 5% de nuestra ciudadanía que se convierta en donante regular de sangre y/o plasma”, explica el profesional. 

Mínimo 50 kilos y no estar en ayunas

Requisitos Por último, los requisitos que hay que cumplir para ser donante de sangre son muy sencillos; hay que tener entre 18 y 65 años, pesar más de 50 kilos y no estar en ayunas. Si es la primera donación, debemos acudir con un documento de identidad con foto para que puedan hacer el registro. El proceso de la donación de sangre comienza rellenando un cuestionario previo sobre nuestra salud y hábitos relacionados con ésta.

Este cuestionario, que el donante repasará junto a un médico antes de donar, es un filtro de seguridad y permite detectar si existe algún motivo de exclusión. “La mayoría de estas exclusiones son temporales, por lo que transcurrido un tiempo es más que probable que se pueda donar. Si bien es cierto que existen exclusiones definitivas, estas son muy pocas. Aproximadamente el 70% de la población puede donar sangre aunque menos de un 5% lo hace con regularidad”, detalla. 

En Euskadi la donación de sangre se gestiona desde el Centro Vasco de Transfusión y Tejidos Humanos, dependiente de Osakidetza. “Este centro es el único autorizado para recoger toda la sangre que diariamente se dona en Euskadi, analizar todas esas donaciones, obtener los tres componentes sanguíneos que se consiguen con cada donación (y el plasma que va a ser esencial para otros muchos medicamentos), almacenarlos y distribuirlos en función de las necesidades de cada centro hospitalario