La Iglesia católica sigue perdiendo fieles y el número de personas que acuden regularmente a misa ha descendido en 160.000 en el último año, aunque las donaciones de los católicos siguen al alza y, por segundo año consecutivo, aumentan un 10 % hasta alcanzar los 383,11 millones de euros.

Así se desprende de la Memoria anual de actividades de la Iglesia católica en el Estado 2022 presentada este martes y que refleja la buena salud económica de la que disfruta esta institución, a pesar de que cada vez son menos los fieles que acuden a las celebraciones y oficios religiosos.

Un dato que, según el secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE), César García Magán, "contrasta con el incremento de las personas que marcan la X de la Iglesia católica, que es superior al porcentaje de personas que asisten a misa los domingos".

Así, el número de personas que van regularmente a misa ha descendido de los 8,2 millones en 2021 a los 8,02 millones de 2022 y han bajado también las comuniones (de 182.760 en 2021 a 171.494), mientras que tanto los bautizos como las bodas han experimentado un repunte: los bautizos pasan de 149.711 a 159.129 y las bodas suben de 25.762 a 35.253.