El Nolotil, también conocido como metamizol, está prohibido en países como Estados Unidos, Australia o el Reino Unido. Sin embargo, en el Estado español sigue siendo uno de los fármacos más utilizados para tratar el dolor, pese a que en 2018 la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) recordó el riesgo de sufrir agranulocitosis que podía conllevar su toma, especialmente entre los pacientes del norte de Europa.

Ahora, el Nolotil vuelve a estar en el punto de mira después de que la Asociación de Afectados por Fármacos (ADAF) haya demandado al Ministerio de Sanidad por los efectos secundarios de este fármaco.

Desde la agrupación aseguran conocer “al menos 350 casos” de agranulocitosis, una caída repentina del sistema inmune, provocados por el metamizol. Según el diario The Guardian unos 170 de estos casos corresponderían a británicos residentes en España o que estuvieron en el país de vacaciones cuando les recetaron el Nolotil. Y es que por causas que aún se desconocen, este medicamento afecta particularmente a la población británica.

Los efectos secundarios del Nolotil

Desde la ADAF señalan algunos de los efectos secundariosdevastadores” que puede llegar a provocar el Nolotil o metamizol.

  • Amputaciones
  • Reacciones alérgicas graves
  • Choques anafilácticos
  • Agranulocitosis
  • Daño renal o hepático
  • Sepsis
  • Fallos multiorgánicos

Las recomendaciones de Sanidad en cuanto al uso del Nolotil

  • Utilizar metamizol solo para tratamientos de corta duración (7 días como máximo), dentro de sus indicaciones autorizadas y a las dosis mínimas eficaces.
  • Si es necesario un tratamiento más prolongado, realizar controles hematológicos periódicos, incluyendo fórmula leucocitaria.
  • Durante el tratamiento, vigilar la aparición de sintomatología indicativa de agranulocitosis, informando a los pacientes que, en tal caso, suspendan el tratamiento.
  • Antes de prescribir metamizol, realizar una anamnesis detallada para evitar su uso en pacientes con antecedentes de reacciones de hipersensibilidad o hematológicas a metamizol, pacientes con tratamiento inmunosupresor o con medicamentos que pueden producir agranulocitosis.
  • Adoptar especial precaución en caso de pacientes de edad avanzada.
  • No utilizar metamizol en pacientes en los no sea posible realizar controles (p. ej. población flotante).