El año pasado se registraron en Euskadi 212 incidencias relativas a vulneraciones de los derechos lingüísticos, 65 menos que en 2021, lo que supone un descenso del 23,5 %.
Así se recoge en el informe del Servicio de Garantía de Derechos Lingüísticos-Elebide que ha sido aprobado este martes en el Consejo de Gobierno vasco.
Del total de incidencias registradas 8 fueron invalidadas por ser repetición de una incidencia anterior o por contener errores y de las 204 restantes, otras 8 fueron rechazadas por no existir fundamento jurídico para la tramitación, por lo que el año pasado se tramitaron 196 incidencias.
De ellas, 178 fueron quejas. Entre estas quejas, el 96 %, hacían referencia al quebranto del derecho a utilizar el euskera y en 7 casos se vulneró el derecho a usar el castellano.
Siete de cada 10 quejas en la administración pública
El 78,6 % de todas las quejas (140) fueron vulneraciones de los derechos lingüísticos acaecidas en el ámbito público y el 21,4 % (38 quejas) correspondieron al ámbito privado. El resto de las incidencias fueron consultas (12), solicitudes (5) y sugerencias (1).
Dentro del ámbito público la mayoría hacían referencia a la Administración General de Euskadi (50 %) y a la Administración Local (34,3 %).
Las quejas relativas a la Administración del Estado y a sus organismos y sociedades (Correos y Telégrafos, Ministerio de Trabajo y Economía Social, Ministerio de Interior y Renfe) fueron 9, es decir 14 menos que en 2021.
Las 178 quejas tramitadas por Elebide el año pasado se agruparon en cuatro áreas: vulneraciones en comunicaciones escritas (58), en su mayoría para denunciar que la información a la que se tenía acceso estaba exclusivamente en castellano; orales (45), con denuncias de que se había vulnerado el derecho a ser atendido en euskera; detectadas en el paisaje urbano (26), por carteles solo en castellano o mal escritos en euskera; y relativas a internet y redes sociales (37).
La segunda cifra más baja desde 2007
De las 178 quejas tramitadas en 2022, 106 (59,55 %) fueron resueltas satisfactoriamente. Se cerraron 58 quejas (32,58 %) sin resolver, fundamentalmente porque la entidad reclamada no respondió a las notificaciones de Elebide.
Por último, 14 de todas las quejas (7,86 %) no fueron resueltas porque el ciudadano no consideró satisfactoria la respuesta dada por la entidad reclamada.
La cifra de quejas recibidas el año pasado es la segunda más baja desde la creación de Elebide en 2007, solo por encima de las 194 de 2019.
El portavoz del Gobierno vasco y consejero de Cultura y Política Lingüística, Bingen Zupiria, ha dicho que estos datos constatan que las administraciones públicas vascas no son capaces aún de garantizar todos los derechos lingüísticos de la ciudadanía vasca, especialmente cuando tiene que ver con el uso del euskera.
