Poco a poco el nuevo edificio del Donostia International Physics Center (DIPC) va sumando pasos de cara a ser una realidad. El Gobierno Vasco destinará en torno a quince millones de euros para su construcción a partir de un diseño elaborado por el estudio de arquitectura navarro Vaillo+Irigaray Architects. El edificio, que contará con 6.800 metros cuadrados que permitirán diversificar las líneas de investigación del centro, se espera que esté listo para 2025.

Así lo han dado a conocer este viernes el consejero de educación, Jokin Bildarraitz; el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano; el alcalde de Donostia, Eneko Goia; y el presidente del DIPC, Pedro Miguel Etxenike, en la presentación del proyecto en la misma sede del centro de investigación, donde el pasado mes de octubre ya se dieron los primeros detalles de la nueva infraestructura.

Tal y como han detallado, y a la espera de concretar la licitación de la obra, la inversión estimada se sitúa en torno a los quince millones de euros, que serán financiados íntegramente por el Gobierno Vasco. Los encargados, por su parte, de dar forma al edificio serán los arquitectos del estudio Vaillo+Irigaray Architects, quienes desarrollarán y dirigirán la ampliación y organizarán el conjunto actual del DIPC.

El nuevo edificio se ubicará en el terreno ocupado actualmente por la zona de aparcamiento y contará con 6.800 metros cuadrados distribuidos en seis plantas. El espacio contará con diferentes laboratorios, despachos y zonas de uso común, así como un auditorio para acoger congresos científicos y eventos públicos. La edificación, además, permitirá reordenar el conjunto exterior con pavimento y zonas verdes.

Asimismo, la fachada se desarrollará siguiendo criterios medioambientales y de sostenibilidad y el patio interior actuará como un sistema de ventilación, calefacción y refrigeración natural contribuyendo a una óptima eficiencia energética.

La previsión es que el nuevo edificio esté acabado en 2025, sumándose así a nuevas infraestructuras para la ciencia y el conocimiento en Donostia como el edificio Korta II de Ikerbasque y la segunda residencia de investigación Talent House.

Fomentar la creatividad

Gracias al proyecto de ampliación, el DIPC podrá dar un salto cualitativo para continuar en el futuro en la vanguardia de la investigación física al contar con una mayor diversificación de las líneas de investigación y una mayor actividad experimental.

“El edificio debe ser esencial para fomentar la creatividad. La ampliación abre las puertas a nuevos progresos y a seguir avanzando”, ha afirmado el presidente del centro de investigación, quien ha asegurado que Euskadi se encuentra en la vanguardia de varios campos científicos.

Goia, por su parte, ha apuntado que el proyecto es “un paso más en convertir a Donostia en una ciudad de ciencia y conocimiento”, mientras que Olano ha recordado que, aunque “los edificios no hacen solos los proyectos, son el alma de la investigación”. Por último, Bildarratz ha recordado que el centro donostiarra es “la punta de lanza de la excelencia científica” de Euskadi gracias a “su referencialidad e internacionalización”.

En la actualidad, el DIPC cuenta con más de 200 investigadores de 35 nacionalidades diferentes repartidos en ámbitos como las tecnologías cuánticas, la supercomputación, la física de partículas, la física del estado sólido, la nanociencia y la neurofísica. Con la ampliación, el centro podrá desarrollar, además, nuevos campos como la cosmología, el estudio de neutrinos y la astrofísica.