La Diputación de Gipuzkoa ha solicitado de forma urgente siete familias de acogida para atender la situación de menores que vienen realidades muy complicadas en sus hogares y necesitan ser cuidados en entornos diferentes. 

La diputada de Políticas Sociales, Maite Peña, ha explicado este miércoles que Gipuzkoa tiene actualmente 403 menores que viven en 350 familias, a los que hay que sumar 58 procedentes de Ucrania. Sin embargo, hay 73 que necesitan una familia que los acoja y siete lo requieren de forma urgente. Se trata de niños y niñas de entre 4 y 14 años que ya llevan tiempo esperando a una familia. "No todos tienen las mismas necesidades pero necesitan el calor de una familia, al tiempo que puedan seguir teniendo relación con sus familias biológicas a pesar de no poder vivir con ellas", ha indicado Peña, que ha explicado que, entre otras cuestiones, la urgencia se manifiesta por la propia edad de los menores, así como por su voluntad de encontrar una familia: "No hay que obviar la edad. Cuantos menos años tienen, más fácil es. Pero en estos casos, además, se le suma que son menores que tienen una madurez tal que les ha llevado a pedir una familia de acogida". "Miren -todos los nombres son inventados para preservar la identidad de los menores, pero sus perfiles y gustos son reales- tiene 10 años y lleva desde los seis viviendo en una casa con otros niños. Le gusta bailar, la pintura y diseñar ropa, y es cariñosa, creativa y lista. Sergio tiene 14 años y vive con otros chavales de su misma edad, le encanta el futbol, y aunque le cueste un poco expresarlo, quiere vivir con una familia que le cuide bien. Jon tiene 4 años y vive con una familia de acogida de urgencia. Lo que más le gusta es jugar con trenes e ir al parque a andar en bicicleta. Melissa tiene 11 años y vive con otros niños y educadores. Le gusta jugar con muñecas. Teresa, una chica de 13 años, vive en un piso de acogida desde principios de año, y dice que disfruta muchísimo de todas las actividades que realizan. Aunque le cueste un poco ponerse al día con las tareas del cole, le gusta mucho pasar tiempo con sus amigas. Omar tiene 12 años y lleva desde los 8 en un piso de acogida. Le gustaría vivir con una familia, como ya hacen sus hermanos. Fani tiene 9 años y sobre todas las cosas, le gusta la gimnasia rítmica. Le da un poco de miedo no encajar con la familia de acogida, pero tiene muchas ganas de vivir con una de ellas", ha expuesto Peña.

La diputada ha recordado que estos menores vienen de situaciones "muy complicadas", con familias de origen que "no pueden garantizar una parentalidad positiva por muy diversos motivos". Desde los recursos de la propia Diputación, se lleva tiempo trabajando con ellos en la posibilidad de que sean acogidos, un deseo que todos ellos han expresado, motivo por el que se les busca una solución de urgencia.

En este sentido, Peña ha remarcado que cualquiera puede ser familia de acogida y que la institución Foral presta la ayuda económica y el apoyo necesarios con un equipo de profesionales que hace el seguimiento del acogimiento. "No van a estar solos en ningún momento. Van a tener el apoyo económico y técnico para resolver todas las dudas que todos podemos tener en la crianza", ha subrayado, al tiempo que ha enfatizado que "el acogimiento familiar es la más garantista con el menor".

Todos aquellos interesados en formar parte de la red de acogimiento familiar de la Diputación de Gipuzkoa pueden solicitar información en la dirección familiaharrera@gipuzkoa.eus o llamando al 943112522.