El Gobierno vasco ha animado a los ciudadanos a pedir las ayudas para la rehabilitación energética de viviendas y edificios a través de los fondos europeos "Next Generation", que ya pueden solicitarse, unas subvenciones que en el caso de Euskadi ascienden a una cantidad total de 86,3 millones de euros.

Inicialmente estas ayudas europeas tienen un presupuesto de 39,1 millones, a los que se sumarán en los próximos meses otros 47,2 millones, unas cuantías que se suman a las subvenciones propias del departamento de Vivienda del Gobierno vasco.

Este departamento ha iniciado este lunes una campaña para informar a los ciudadanos interesados de los trámites correspondientes para solicitar las ayudas que se pueden formalizar a través de las oficinas de Visesa y de las sociedades urbanísticas de rehabilitación de Euskadi.

Las subvenciones van dirigidas a las reformas iniciadas desde el 1 de febrero de 2020 y serán atendidas por orden de presentación y hasta que se agoten los fondos. En todos los casos las obras deberán ser ejecutadas antes del 30 de junio de 2026.

Subvenciones de hasta el 40 %

Todas las actuaciones que aspiren a acogerse a este financiación deberán incluir el criterio de la eficiencia energética mediante la reducción de la demanda energética y del consumo de energías no renovables en viviendas y edificios. En el caso de las viviendas que mejoren la eficiencia energética el coste de la reforma será de al menos 1.000 euros por vivienda y la cantidad subvencionada del 40 % del total con un límite de 3.000 euros.

Para la mejora de eficiencia energética en edificios de viviendas se tendrá que llegar a una reducción como mínimo del 30% en el indicador de consumo de energía primaria no renovable (gas, carbón) e incluir una reducción de la demanda de calefacción y refrigeración. Las cuantías máximas de esta línea oscilan entre los 18.800 y los 6.300 euros, en función del ahorro energético logrado por la reforma.

En este programa hay ayudas específicas a unidades convivenciales en situación de vulnerabilidad económica en los casos en los que la comunidad decida abordar una rehabilitación energética.