- Las playas de Donostia y la de Zarautz comenzaron ayer a ofrecer los servicios de socorrismo y baño asistido que funcionarán hasta el 15 de septiembre, y además han abierto las duchas, los lavapiés y los urinarios, aunque no en su totalidad para garantizar la distancia entre usuarios. Pero la gran novedad fue que ambas localidades empezaron a controlar los accesos a sus arenales, situación que se repetirá durante todo el verano para evitar aglomeraciones y seguir así las recomendaciones sanitarias que permitan controlar la expansión del COVID-19.

Zarautz ha dividido su playa en siete zonas y hay otros tantos accesos en los que una persona controla el aforo mediante un contador. En cada uno de esos accesos hay un cartel informativo que indica los horarios de la bajamar y de la pleamar y los aforos máximos en cada caso. El alcalde, Xabier Txurruka, decía la semana pasada que controlar el acceso de las personas "una a una" es "la única manera de poder garantizar el control del aforo en todo momento" y que los usuarios "se sientan seguros".

En la playa de La Concha son los llamados hondartzainak quienes controlan las tres entradas al arenal -en la Plaza Cervantes, en la rotonda de los relojes y en el acceso junto al Eguzki-, aunque, a diferencia de Zarautz, sin contador. En su caso, indicarán mediante banderines situados en estos tres puntos la situación del aforo: el banderín verde indica que el acceso no está restringido; el amarillo que la pleamar se acerca o que la playa empieza a llenarse, y el rojo que el aforo está completo y que es la hora de la pleamar, momento en el que se cerrarán las entradas. Además de esta medida, el Ayuntamiento recuerda la "recomendación de no hacer uso de la playa dos horas antes y hasta dos horas después de la pleamar". En cualquier caso, no es una prohibición expresa, por lo que se apela nuevamente a la responsabilidad individual para acatar las reglas.

Las otras dos playas de Donostia -Ondarreta y La Zurriola- informarán de su aforo a través de la web del Ayuntamiento -con información de las cámaras que medirán el espacio disponible- o mediante la app de la Diputación, ya que no tienen el mismo problema en pleamar que La Concha.

En el primer día con estos controles de aforo no hubo ningún problema de aglomeración en los arenales, ya que era día laborable y el tiempo no acompañó en exceso. Y la previsión para el resto de la semana es de cielos nublados y lluvia. La prueba para comprobar si estas medidas de los ayuntamientos de Donostia y Zarautz son efectivas llegarán, por tanto, más adelante.

Coincidiendo con el inicio de la temporada oficial de baño en Euskadi, el Gobierno Vasco recordó ayer, mediante una nota de prensa, las normas de uso y las recomendaciones sanitarias que deben seguir los usuarios de playas y pantanos: informarse de las condiciones de acceso y aforo antes de acudir, planificar estancias más cortas, mantener los dos metros de distancia son las personas con las que no se conviva, mantener la higiene de manos, no compartir toallas y vigilar que los menores cumplan las medidas preventivas.

En los tres accesos a La Concha un banderín de colores -verde, amarillo o rojo- indicará la situación del aforo