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“Puedes ganar dinero recortando, pero dedicarte solo a ello es imposible”

Ander Lizarralde ya piensa en el siguiente reto después de ganar en el concurso de recortadores de anillas de San Fermín con Joanes Balenciaga

“Puedes ganar dinero recortando, pero dedicarte solo a ello es imposible”

Donostia - Los sanfermines siempre dejan imágenes espectaculares con toros, también en una modalidad no tan mediática ni conocida como la de los recortadores. Una disciplina donde dos guipuzcoanos, Joanes Balenciaga y Ander Lizarralde, de Azkoitia y Villabona, respectivamente, han conseguido una meritoria victoria en el concurso de anillas del pasado domingo en las fiestas de San Fermín. El de Villabona todavía saborea el gran logro conseguido, pero ya piensa en retos mayores y en seguir mejorando, pese a que tiene que ir a trabajar a diario muy temprano.

¿Qué tal después de todo un logro como ganar el concurso de anillas de San Fermín?

-A gusto. Al final es una de las metas que tenemos los que andamos en el mundo de los toros y de las anillas. Ganar San Fermín es una de las cosas más importantes de todo el año y muy bien. Es un logro más, queremos seguir creciendo en esto y ganar más.

¿Cómo fue el concurso? Tuvieron un susto.

-Sí. Nos tocó una de las vacas más asequibles que había en el sorteo y sabíamos que no podíamos fallar. Al final arriesgamos tanto físicamente que las ganas de meter anilla y no poder nos trajeron algún susto de salud, pero al final sin consecuencias.

El azkoitiarra Joanes Balenciaga y usted fueron pareja en el concurso y también lo son en la liga. ¿Llevan mucho compitiendo juntos?

-Esta es la segunda temporada que competimos juntos, pero anteriormente ya habíamos hecho concursos sueltos. Yo antes andaba con Aitor Jaso, que es otro recortador vasco. En gran parte empecé en este mundo de las anillas por él, y me ha ayudado y enseñado mucho desde el principio. Y con Joanes, al ser los dos jóvenes, decidimos salir juntos. Al ser una pareja, tenemos que compenetrarnos bien para los concursos y decidí desde el principio ir con él. Tenemos que entendernos porque si en la plaza cada uno hace lo suyo y no nos compenetramos, no conseguimos meter las anillas.

Para los que desconozcan este deporte o esta competición, ¿en qué consiste exactamente? Explique.

-Esta modalidad está dentro del festejo popular, que tiene diferentes variantes. En los concursos que solemos hacer hay unas 9 o 12 parejas. Se sortean las vacas, normalmente de ganaderías conocidas, que suelen ser fuertes. Aunque depende del concurso, se ponen más fáciles o complicadas. Se hace un sorteo previo al concurso, te toca una vaca. Entre los dos solemos preparar y decidir cómo trabajamos con ella porque las solemos conocer. Tienes tres minutos de concurso y tienes que intentar meter las máximas anillas posibles en los pitones. Se suele recortar por el asta derecha, pero a nosotros nos da igual.

Es decir, la pareja que obtiene la victoria es la que más anillas mete.

-Eso es. Luego si hay empate las parejas empatadas se intercambian las vacas para romper la igualdad.

¿Cómo va la liga de recortadores?

-La liga al final es una serie de concursos que se hacen durante toda la temporada en distintos lugares, sobre todo, en Aragón y Navarra. Pero también en Castellón, Valencia, La Rioja, Soria, o incluso en Euskadi se han hecho también. El mérito más grande es ganar en las fiestas del Pilar en Zaragoza en octubre, que es la final de España. Estuvimos el año pasado y nos salió bastante bien pese a que me hice daño. Y lo siguiente es ir a ganar a Zaragoza de nuevo, y ser campeones de liga. Pero bueno, todavía queda mucho para eso, creo.

¿Hay afición de recortadores en Gipuzkoa? ¿Existen ligas, federaciones o clubes que os apoyen?

-Qué va. En Gipuzkoa no hay nada. En los pueblos se suelen hacer muchas becerras, y en algunos como Villabona se hacen también vaquillas, pero no hay nada. Hay gente que intenta organizar eventos o exhibiciones, pero ni federación ni ningún apoyo de ese tipo.

¿De dónde surge su afición por esta modalidad?

-Yo empecé a los diez años o así, cuando ves las becerras en el pueblo. Te animas, te atreves, empiezas a jugar y a salsear, te gusta cada vez más, pasas de becerras a vaquillas... Aquí en Gipuzkoa está limitado el tema vaquillas, pero si bajas a Navarra o Zaragoza, tienes mucho para aprender. Aquí al final no hay mucho nivel de vacas, se suelen echar vaquillas pequeñas. Entonces empiezas a bajar a Navarra, a practicar, a conocer gente, a meterte cada vez más en el mundo y luego ya empiezas a competir.

Se le hará difícil compaginar el ser recortador con su trabajo.

-Sí, al final los concursos suelen ser los fines de semana y no suelen ser cerca de casa. Puedes tener suerte alguna vez, pero ya te digo, San Fermín e Iruñea es lo más cerca que te puede tocar. Luego hace un par de meses estuvimos en Castellón. Tienes que ir, dormir, luego vienes el domingo y llegas tarde a casa, y el siguiente día a la mañana a trabajar. Si te toca entre semana y decides ir, te pegas la paliza. Algunas veces ya hemos renunciado a ir si era muy lejos y entre semana, por no darnos la paliza.

¿Cómo entrenan los recortadores?

-Lo más lógico es que no podamos entrenar a diario con vacas, no es viable. Puedes dividir en tres aspectos el entrenamiento. Primero físicamente, que puedes trabajar diariamente con esprints y carrera de fondo para aguantar más. Luego utilizamos un carretón o unos cuernos de vaca y simulamos la situación para mejorar las posturas y meter anillas. Y luego se ha de entrenar delante de la vaca echándote capeas privadas o yéndote a pueblos donde haya exhibiciones. Al final lo más importante es sentirte cómodo delante de la vaca.

¿Le gustaría dedicarse a ser recortador?

-Muy buena pregunta (resopla). Esto ahora mismo creo que es imposible. Puedes ganar dinero, pero dedicarte completamente a esto es bastante difícil. No nos renta y nosotros que tenemos muchos kilómetros recorridos gastamos mucho en gasolina. Tenemos otro trabajo, y si puedes salir a competir, compites. Es una pena que no se pueda profesionalizar, pero es lo que hay.