donostia - Gipuzkoa aún deberá adaptar cuatro túneles y medio de más de 500 metros para cumplir la nueva normativa europea que entrará en vigor el próximo mes de mayo con nuevos requisitos de seguridad. Los túneles afectados son los de Belabieta, Gorosmendi y Oindolar en la A-15, así como uno de los carriles del de San Lorentzo también en esta autovía, y el de Itziar en la AP-8. Todos ellos se ajustarán a la nueva directiva en un plazo máximo de cuatro años, según la Diputación.

La normativa, que se aprobó en 2004, fijaba los requisitos mínimos de seguridad que debían cumplir estas galerías incluidas en la red transeuropea de carreteras, como contar con sistemas contra incendios, áreas de evacuación, de detección de incidentes, de megafonía y ventilación y puntos de socorro, entre otros.

El objetivo era prevenir “situaciones críticas que pudieran poner en peligro la vida humana, el medio ambiente y las propias infraestructuras”. Accidentes dramáticos ocurridos entre 1999 y 2001 en los túneles de Mont Blanc entre Francia e Italia, Tauern en Austria y San Gotardo en Suiza, que causaron decenas de muertos, obligaron a Europa a analizar y reformular la seguridad en el interior de estas infraestructuras.

Dos años después de la aprobación de la normativa europea, el Estado publicó un Real Decreto en 2006 en el que se recogían los requisitos mínimos de seguridad. “Los túneles merecen una atención especial. No es porque en ellos se produzcan más accidentes que en otros puntos del trazado, sino porque cualquier incidencia grave que les afecte puede provocar alarma social, dadas las circunstancias del lugar en el que se produce, las dificultades de rescate o evacuación, el dramatismo provocado por el confinamiento o el trastorno que para el sistema de transportes puede suponer el cierre temporal de un tramo viario, en ocasiones con alternativas difíciles o inexistentes”, se explicaba en este Real Decreto.

moratoria de cinco años Los países europeos contaban con un plazo para adecuar sus túneles hasta el 30 de abril de 2014, pero para esa fecha solo el 26% de los del Estado estaban adaptados a los nuevos requisitos de seguridad. Por tanto, se concedió una moratoria de cinco años que finaliza el próximo 30 de abril, por lo que en mayo todas estas infraestructuras deberán cumplir la normativa.

Gipuzkoa no llegará a esta fecha. En la actualidad, el territorio cuenta con 83 túneles que suman 64.516 metros. La nueva directiva solo se debe aplicar a los que tienen más de 500 metros de la red transeuropea, es decir, a 14 de esos 83 túneles. De estos 14, “cumplen 9,5”: Aginaztegi, Isuskitza, Zarimutz, Gurutzetxiki, Ikastaundi, San Martzial, Lesarri, Gallaztegi, Eitza y uno de los tubos de San Lorentzo-Larre. Según señalan desde la Diputación, los trabajos en el otro tubo de San Lorentzo se realizarán este año en su totalidad y para el resto hay “un plan establecido para los próximos cuatro años (2020-2023)”.

En concreto, se realizarán trabajos de adecuación a la normativa europea en los túneles de Belabieta, de 1.842 metros, en el de Gorosmendi de 814 metros y en el de Oindolar de 552 metros, los tres en la A-15, así como en el de Itziar, de 520 metros, situado en la AP-8. La Diputación ya ha acometido trabajos en once túneles del territorio y un total de tres - Isuskitza, Aginagaztegi y Zarimutz, todos ellos en la AP-1- se han construido bajo las directrices europeas.

“Seguros y vigilados” Pese a que Gipuzkoa no llegará a cumplir el límite establecido para adaptar estas catorce infraestructuras a la normativa europea, la Diputación está convencida de que el territorio cuenta con túneles “seguros”, vigilados las 24 horas los siete días de la semana por “personal experto y con la tecnología adecuada y puntera para garantizar la seguridad vial”.

Asimismo, subrayan, “Gipuzkoa es el primer territorio del Estado en utilizar tecnología led como única forma de iluminación en túneles” en los de Legorreta, Itsasondo y San Lorentzo. “Además de ser energéticamente más eficiente y, por lo tanto, medioambientalmente más sostenible, proporciona una extraordinaria uniformidad y una gran calidad de reproducción del color, lo que mejora la visibilidad y percepción, ofreciendo mayor confort y seguridad a los usuarios”, defienden desde la institución.

Requisitos. Los túneles deben cumplir una serie de requisitos mínimos sobre sistemas contra incendios, de ventilación o detección de incidentes, galerías de evacuación o postes de socorro.

Objetivo. La finalidad de la nueva normativa es prevenir “situaciones críticas que puedan poner en peligro la vida humana, el medio ambiente y las propias infraestructuras”.

Atención especial. En los túneles no se producen más accidentes, pero en caso de incidencia grave el rescate o la evacuación tiene mayor dificultad.

Precedentes. Dramáticos accidentes con decenas de muertos ocurridos en los túneles de Mont Blanc, Tauern y San Gotardo llevaron a Europa a reflexionar sobre la seguridad en los túneles.

83

Es el número de túneles que hay en el territorio. De estos 83, un total de 14 tienen más de 500 metros de la red transeuropea, por lo que se deben adaptar a la nueva normativa que entra en vigor en mayo.