Micromecenazgo para los gigantes de Irun

Irun. Son cuatro parejas de gigantes. Casero y Casera, Alcalde y Alcaldesa, Negro y Negra, Turco y Turca. Llevan desfilando en todo tipo de eventos en Irun desde hace al menos 80 años, de la mano de la sociedad Irungo Atsegiña, que los recibió en donación, en el año 1937, "de manos de María Gal, viuda de Rodríguez", tal como consta en la documentación que aún conserva la entidad, radicada en la Parte Vieja de la ciudad fronteriza.

Los que para muchos son los Gigantes de Irun llevaban años en un estado precario y "el pasado 28 de junio, en plenos sanmarciales, dijeron basta. El viento derribó alguno de ellos, ocasionando daños importantes, y fue el momento de decidirse a poner en marcha un proyecto para su reparación y rehabilitación integral", explicó ayer el vicepresidente de Irungo Atsegiña, Jesús Rubio.

La entidad ha recurrido al taller Esku Artean de Pamplona para diseñar un proyecto que los deje en perfecto estado de revista, a partir de un análisis detallado de su composición, de las actuaciones que se han hecho sobre ellos y en definitiva, de su estado y necesidades.

"Esa recuperación y reconstrucción casi completa de trajes, estructuras, pelucas y demás piezas y complementos tiene un coste total de 89.981,65 euros, que la sociedad va a asumir en una parte con sus fondos propios, además de invitar a los socios y a la sociedad en general a financiarla, apadrinando, mediante un micromecenazgo, las partes en las que se ha dividido cada gigante", explicó Eneko Calvo, directivo de Irungo Atsegiña.

¿Serán de Bilbao? Indagando en archivos y documentación, los restauradores se han encontrado con una sorpresa. "Hay una imagen de unos gigantes de Bilbao, del año 1895, idénticos a los nuestros, que son de elaboración totalmente artesanal y con elementos únicos como las manos de madera de cedro. No podemos saber si se trata de dos conjuntos de gigantes iguales o si aquellos de Bilbao son los que hoy tenemos en Irun, pero van a ser la imagen de referencia para restaurar nuestros gigantes", concluyó Jesús Rubio.