Queridos Reyes Magos, queriod Olentzero... estas navidades Patrulla Canina y Peppa Pig serán los protagonistas de las sonrisas de los más pequeños. Cada año, una nueva película o serie animada causa furor entre los niños, y esos mismos personajes son los que quieren para sus regalos de Navidad. Así es como cada diciembre se disputa la guerra de las licencias, en la que los fabricantes tratan de acertar en la adquisición de los derechos de imagen de las distintas series.

“Patrulla Canina es una serie de dibujos animados en la que salen seis perros que hacen misiones de rescate para ayudar”, explica Idoia Gallardo, encargada de la juguetería Toy Planet Jostamendi situada en la calle Prim de Donostia. Los productos de esta serie están tan cotizados que en su tienda ya está “agotada de fábrica” la base de salvamento en la que se entrenan estos simpáticos perros. “Va a ser el regalo más difícil de conseguir de estas navidades”, apunta. Sin embargo, existe una amplia gama de juguetes de esta línea, que va desde vehículos, pizarras, guitarras, muñecos, mochilas, puzles y todo lo que uno pueda imaginarse.

En la misma franja de edad, pero algo más enfocado hacia las niñas, está triunfando Peppa Pig, una cerdita que vive con su familia. En esencia, “los juguetes son los mismos, pero con una cara distinta y en el 90% de los casos funcionan según los dibujos que aparecen en la tele”, aclara Antonio, socio de las tiendas de juguetes Afede, presentes en todo el País Vasco, Navarra y La Rioja. Es decir que cada nueva temporada triunfan unos dibujos, y los fabricantes se hacen con sus licencias para producir todo un abanico de productos en los que estampar sus ilustraciones.

“Cogen una licencia y hacen desde la casa para jardín, con dibujos de Peppa Pig o Frozen, hasta un puzle, una mochila o lo que sea”, recalca Gallardo. Así, hay padres que “tiran por juguetes educativos, pero si las letras vienen con dibujos de princesas, les entra más fácil a los niños”, señala. El problema de las licencias es que a veces los propios importadores no cuentan con tales éxitos y se quedan sin stock. “Por ejemplo, Patrulla Canina se le va a acabar a todo el mundo, porque ha salido nuevo este año y ha pegado muy fuerte. Le ha pillado por sorpresa hasta al importador. La empresa es española, pero lo traen de China, y para traer un nuevo barco tardan tres meses, y ya se habrán pasado las navidades”, detalla el socio de Afede, que asegura seguir teniendo productos de Patrulla Canina.

Para el siguiente escalón de edad, o sea niños que ya tienen ocho años, los héroes del momento son los Vengadores y Spiderman. Mientras que las niñas se decantan por las Descendientes, una nueva serie de televisión, y las princesas de Frozen, debido a que próximamente se estrenará su segunda película. Por último, los niños que son algo mayores piden Minions y Star Wars, esta última opción también incluye a algunos padres que “se llevan figuritas de recuerdo”, afirma Gallardo.

La tecnología y los precios han dado una vuelta este año, por ejemplo en la variedad de mascotas interactivas y robots que llegan hasta los 200 euros. En cambio, “en los últimos tres años, había pocas cosas de más de 100 euros porque las fábricas no se animaban a innovar”, apostilla la encargada de Jostamendi. Sin embargo, esta temporada la tecnología ha llegado hasta los juegos de mesa. Antonio destaca que las tabletas desbancaron el año pasado a los consolas portátiles. Pero es que este año son los móviles los que han superado a las tablets. Por eso, juegos de mesa tradicionales tratan de adaptarse creando contenidos extra mediante aplicaciones móviles.

Aún con todo, desde estas jugueterías aseguraron que los juegos tradicionales, como el cubo de Rubik, el parchís o el ajedrez, siguen haciendo la competencia a los más modernos. “Le voy a regalar a mi nieta una muñeca de las de siempre”, asegura Carmen Ansoain mientras decide cuál escoger entre decenas.

Esta donostiarra salió ayer en busca de la lista de regalos para sus nietos y confiesa que ese obsequio le hacía “casi más ilusión” a ella de lo que le hará a su nieta.

Los juguetes más codiciados empiezan a escasear y la cuenta atrás ya ha comenzado.