donostia - En Gipuzkoa cada año se diagnostican 140 casos de la enfermedad del párkinson, una patología que afecta a cerca de 2.000 guipuzcoanos. Gracias a los avances médicos, se están encontrando cada vez más diagnósticos de personas menores de 40 años. No obstante, se sigue sin saber cuál es el causante de esta tendencia. La presidenta de Aspargi, la Asociación de párkinson de Gipuzkoa, Carmen de Olazabal mostró ayer la preocupación de la asociación por esta realidad que afecta a 300 personas jóvenes. Por ello, presentó ayer la campaña de sensibilización que lanzan cada año, ya que sigue existiendo “un sector de la población que no sabe lo que es el párkinson”.

Junto a ella, comparecieron en Donostia el neurólogo y médico asesor de Aspargi Gurutz Linazasoro y el diputado de Política Social de Gipuzkoa, Ander Rodríguez.

“La enfermedad se asocia a la edad, aunque no es causada por el envejecimiento”, apuntó Linazasoro. “Tampoco es exclusiva de los mayores. Un 15% puede comenzar antes de los 40 años”, explicó. Además, se suma el hecho del envejecimiento de la población, que convierte a esta en una “época en la que cada vez va a haber más personas afectadas”. Por esta razón, Aspargi se ha puesto en marcha, como cada año, para informar a la ciudadanía sobre la enfermedad. Los voluntarios, todos ellos familiares de afectados, repartirán 20.000 dípticos por los diferentes hospitales, centros de salud y farmacias con la intención de darla a conocer.

la enfermedad El párkinson es una patología que provoca la pérdida progresiva de neuronas cerebrales que producen una sustancia esencial para moverse de forma ágil y coordinada, la dopamina. De Olazabal, que conoce la dolencia desde el año 62, comentó que se trata de una enfermedad “caprichosa”, porque no es estable. “Tiene picos a lo largo del día y hay que tomar la medicación tres o cuatro veces. Cuando baja esa gasolina, los enfermos se quedan parados y surgen otros problemas”, explicó.

En esta misma línea, Linazasoro manifestó que “el párkinson es mucho más que un temblor”, además de síntomas motores, afecta a la esfera anímica, siendo muy frecuente la depresión. También genera pérdidas de memoria o “dificultades en la preparación y ejecución de planes”. Y puede manifestarse en forma de hormigueos o estreñimiento, síntomas que hacen “que sea mucho más difícil de manejar”. No tiene cura ni prevención porque no se sabe su causa, pero los tratamientos son muy eficaces.

Además, Linazasoro recalcó que Gipuzkoa se encuentra en muy buena posición tanto médica como de investigación en esta materia.