Donostia. Su llegada estaba anunciada como una visita no deseada y Xynthia, como se bautizó a la ciclogénesis explosiva, no faltó a la cita. El vendaval sacudió estructuras, agitó mobiliario urbano, arrancó árboles y, sobre todo, provocó mucho miedo. Aunque las rachas eran esperadas horas antes, las peores sospechas no se confirmaron hasta pasadas las 17.00 horas. Los vientos que se dirigían veloces hacia la CAV entraban por Galicia a 190 kilómetros por hora y el timbre de los teléfonos de Lakua comenzaba a sonar con tono de preocupación, ya que la trayectoria gallega dibujaba el peor de los escenarios. "El grado de afección más severo de todos los previstos para Euskadi", lamentaba a media tarde el consejero de Interior, Rodolfo Ares. El viento llegaría desde el suroeste para después cambiar bruscamente a componente oeste, lo que provocaría una negativa afección en las zonas de costa que inicialmente no estaba contemplada. Tocaba movilizarse.

El Ayuntamiento de Vitoria daba orden inmediata de suspender todas las actividades de la ciudad. En Bizkaia, en las faldas del monte Artxanda, en las afueras de la capital vizcaina, cuatro familias del barrio erandioztarra de San Pablo fueron desalojadas de sus viviendas después de que el fuerte viento racheado avivara las llamas provocadas, al parecer, por la quema de rastrojos en la zona.

Los centros comerciales cerraron a las 19.00 horas, y el transporte público se suspendió a partir de las 20.00 horas. El panorama apocalíptico se propagó durante el anochecer de ayer por toda la geografía vasca. Desde SOS Deiak comunicaron que, hasta las 19.00 horas, habían recibido 89 llamadas en Bizkaia, y otros 30 en Álava. Asimismo, fuentes de la compañía Iberdrola notificaron a la Mesa de Crisis la seria afección de suministro eléctrico en las localidades como Balmaseda, Elorrio, Karrantza y Abadiño. Se vieron afectados 17.000 abonados en Bizkaia y 200 en Araba.

Desde 19.00 horas y hasta el cierre de esta edición, los bomberos del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento de la Diputacion Foral de Bizkaia habían realizado en torno a 40 salidas motivadas por el temporal de viento. Las intervenciones efectuadas, que no revistieron gravedad, vinieron motivadas por caídas de tejas, ramas y cortes de luz en zonas como Abadiño, Gueñes y Balmaseda. La caída de un árbol en Romo causó daños a cuatro coches.

El polideportivo de Armiñon, en Álava, sufrió daños graves por el viento. Como medida preventiva, el servicio de tranvía quedó suspendido a las ocho de la tarde en las ciudades de Bilbao y Vitoria. El azote de Xynthia ocasionó también la cancelación de cinco vuelos con salida o llegada en los aeropuertos vascos, así como el desvío de otros dos. A primera hora de la tarde de ayer un vuelo que debía haber aterrizado en Loiu fue desviado hasta Foronda.

Los transportes por carretera también se vieron afectados por la alerta roja de viento ya que Interior suspendió la circulación de autobuses privados o públicos, prohibió la circulación de camiones y pidió a los ciudadanos no usar el coche "salvo que sea imprescindible". Estas fuertes rachas de viento obligaron a suspender desde las 18.00 horas el tráfico de trenes en toda Navarra. Los bomberos navarros centraron sus actuaciones principalmente en la retirada de chapas, árboles, señales de tráfico y saneamientos de fachadas. Pero ninguno de los vuelos programados para ayer con destino o salida desde el aeropuerto de Noain se vieron afectados por el tempora