Con la llegada del verano y el buen tiempo uno de los planes que más apetece es alejarse de la ciudad para desconectar en la naturaleza.

Gipuzkoa cuenta con innumerables zonas en plena naturaleza donde hacer senderos y disfrutar de la tranquilidad del monte. Numerosos parques naturales hacen del territorio un destino ideal para los amantes de la montaña.

Uno de los parques naturales más destacados es el de Pagoeta. Cerca de Zarautz existe una variante de paisaje humanizado de campiña y caseríos, con su centro en el Monte Pagoeta, alzándose sobre los núcleos rurales de Aia y Laurgain.

El Parque Natural de Pagoeta refleja el equilibrio entre el medio natural y el medio humano. Abarca una superficie de 2.860 hectáreas, pertenecientes en su mayor parte al término municipal de Aia y, en menor medida, a los de Zarauz y Zestoa. Debe su nombre al monte Pagoeta, de 678 m de altitud, que forma parte de la cadena de montañas de la costa guipuzcoana.

Para comenzar a conocer el Parque, lo más recomendable es dirigirse a Iturraran Parketxea, donde los visitantes son informados y atendidos. A partir de ahí las preferencias personales harán que el visitante se decante por la oferta museística, naturalística, patrimonial o senderista.

Función formativa

El Parque Natural de Pagoeta desarrolla una función formativa y recreativa de notable interés. Una escuela de la naturaleza y centro de visitantes, en un magnífico caserío del siglo XV, componen la oferta divulgativa del Parketxe Iturraran.

Otros elementos interesantes de Pagoeta son la ferrería de Agorregi, de comienzos del siglo XV y las neveras, que muestran las antiguas técnicas de conservación por frío.

Otro punto para quienes aprecian la historia son las importantes huellas prehistóricas que alberga este parque: dólmenes (Otagain, Olarteta, Zaingo), túmulos (Muzin, Arreta...) y yacimientos en cuevas (Erratia y Amalda en el valle de Alzoralas).

Razas autóctonas

Asimismo, la presencia de razas de ganado autóctono es de singular valor, como la vaca betizu o el caballo pottoka.

También destaca que la vertiente norte del Parque Natural de Pagoeta está cubierta de arbolado procedente de repoblaciones efectuadas con diferentes especies a partir de 1956, bajo cuya cubierta, como sotobosque, es muy común la presencia del tejo.

Beneficios físicos y mentales

Ir al monte ofrece numerosos beneficios para la salud física y mental.

La actividad al aire libre, como el senderismo, mejora la condición cardiovascular y fortalece los músculos. Además, el contacto con la naturaleza reduce el estrés y la ansiedad, promoviendo una sensación de bienestar y relajación.

Respirar aire fresco y disfrutar del entorno natural también mejora la calidad del sueño y aumenta la energía. La exposición a la luz solar ayuda a la producción de vitamina D, esencial para la salud ósea.

En conjunto, ir al monte es una excelente manera de mejorar la salud integral y reconectar con la naturaleza.