Arraun Lagunak ha ganado hoy en Orio para llevarse una nueva victoria, la duodécima de la temporada. Hoy lo ha hecho con sufrimiento, y es que en el largo de ida parecía que podía ser el día en el que se pusiera fin a la racha triunfal. Pero no ha sido el caso, la Lugañene ha reaccionado en popare con una exhibición de Andrea Astudillo, su patrona. Esto es un trabajo de equipo, pero ella hoy ha dado una lección magistral de la importancia de ese puesto, hoy con una defensa a ultranza de su calle. Masterclass de la de Zierbena, que ha hecho que su embarcación haya logrado remontar para entrar por delante de Tolosaldea, Orio y Hondarribia, que hoy ha acabado cuarta.
Antes de comenzar la tanda los jueces han mostrado la bandera azul a Tolosaldea por tardar en colocarse. Último aviso a navegantes, nunca mejor dicho. No era fácil colocarse para la salida, después cuando parecía que estaban alineadas ha sido Maider Etxaniz, patrona de Orio, la que ha tenido que soltar la estatxa. Cuando ya ha arrancado esta tanda de honor ha sido la propia Txiki, anfitrionas hoy, la que ha logrado llegar al minuto de regata en cabeza, un segundo mejor que Tolosaldea, tres que Arraun Lagunak que no ha acertado en la salida y cuatro que Donostiarra. Las entrenadas por Ramón Erostarbe, por momentos, se ponía en el mismo tiempo, pero ninguna realmente reducía la distancia con las de Patxi Francés, sosteniendo esa primera posición. A falta de 400 metros la Lugañene ha comenzado a reaccionar, como ya es habitual y ponerse a solo un segundo de Orio. Llegando a la maniobra, Tolosaldea se ha puesto en cabeza, pero en ciaboga han recuperado esa embarcación las anfitrionas, con Arraun Lagunak girando a dos segundos. Donostiarra ha girado a cuatro.
Largo de vuelta
Orio, Arraun Lagunak y Tolosaldea han arrancado el largo de vuelta en un solo segundo, momento en el que el juez de mar se le ha cruzado a las de Juan Mari Etxabe generándole una ola que le ha podido perjudicar, en un movimiento que ha sido difícil de comprender por parte de la motora. Maider Etxaniz ha metido la trainera de Orio en la calle de Arraun Lagunak, pero Andrea Astudillo ha mantenido la calle y, practicamente, ha obligado a Orio a volver a su calle. Una lucha preciosa entre las patronas de la que Andrea Astudillo ha salido victoriosa. Arraun Lagunak, a 900 metros de meta, se ha puesto en proa de regata por primera vez y ha podido abrir la diferencia a dos segundos., una trainera a 700 metros. La Lugañene ha reaccionado para, a 500 metros de meta, ir cinco segundos por delante las de Patxi Francés y de las patroneadas por Laiene Izagirre. Sufrimiento en el largo de ida, capacidad de reacción en popare para acabar entrando seis segundos por delante de Tolosaldea, que ha hecho un gran final de regata, nueve de Orio y 19 de Donostiarra.
Hondarribia domina la primera tanda
Sin dar opción a la sorpresa, la primera tanda se la ha llevado Hondarribia, que no ha dado ninguna opción desde las primeras paladas y se ha puesto en proa de tanda nada más arrancar, un día más, haciendo patente que en esta tanda apenas tiene competencia. Le puede salir alguna regata mala, pero si da su mejor nivel es difícil que sea cazada. A los dos minutos de regata la Ama Guadalupekoa ha llegado cinco segundos mejor que Cabo e Hibaika y ocho segundos por delante de Tirán. La tanda, salvo algún contratiempo inesperado, estaba sentenciada. Por detrás había mucha miga. La embarcación de Boiro y la Madalen bogaban en el mismo tiempo a 500 metros de ciaboga. Cuatro puntos les separaban en la general en esa pelea por evitar el play-off. A 400 metros Hibaika ha logrado pasar a Cabo para poco a poco abrir una pequeña diferencia. En ciaboga han sido dos segundos, poco, pero quién sabe si iba a ser suficiente.
Hondarribia, con la tanda en el bolsillo, ha salido de la ciaboga ocho segundos por delante de las de Errenteria, que a su vez han logrado cinco segundos de ventaja en la maniobra con Cabo. En la salida, las gallegas se han vuelto a poner a una trainera, haciendo ver que aún no había nada decidido. Hibaika rápidamente ha enfilado a babor, intentando paliar lo máximo posible el rebote de la calle uno, y ha logrado una ventaja de seis segundos a 800 metros de meta. Hondarribia, mientras, estaba disputando su particular contrarreloj, regata cómoda para ellas. Las de Iñaki Mendizabal, mediado el segundo largo, han hecho lo propio, a 500 metros de meta la diferencia con Cabo y eso iba a significar un punto más de ventaja en la general en la pelea por evitar esa penúltima posición que obliga a disputar la permanencia en septiembre. Ya son cinco puntos en la general a falta de solo cuatro pruebas. No es cerrar la salvación, pero este fin de semana ha dado un paso de gigante.