donostia. Hondarribia B se adjudicó la ikurriña Errenteriako Hiria con un último largo en el que dieron buena cuenta de los vatios que tiene dentro de sus tostas la trainera hondarribiarra. Además, la tripulación verde consiguió su primera bandera de la temporada, confirmando las aptitudes de esta plantilla para poder luchar a finales de verano por estar en los puestos de ascenso a la Liga ARC-1. Los bidasotarras se impusieron en esta regata a contrarreloj a San Pedro B, que se pone al frente de la clasificación general, y a Arkote, que progresa favorablemente con el paso de las jornadas.
La regata transcurrió en unas condiciones favorables para la práctica del remo, con lo que la fuerza y la calidad de cada una de las catorce traineras que conforman la Liga ARC-2 de medirse contra el reloj iba a ser la única miga que tendría la prueba que se celebró, además, el día de inicio de las fiestas patronales de Madalenas en la localidad guipuzcoana.
En dos tandas de siete embarcaciones cada una, y con un minuto de separación entre cada bote, hubo pocas sorpresas. En la tanda final, en la de los siete mejores, Hondarribia B, San Pedro B, Arkote y Getxo se iniciaron con su trabajo con fuerza y descolgaron para la primera ciaboga a Deusto en la lista de favoritos a la victoria. La trainera morada fue la primera en llegar al ecuador de la estropada, pero los bidasotarras, con una última txanpa impresionante, recuperaron los casi tres segundos de desventaja con la que iniciaban el último largo, y aventajaron en cuatro segundos a los pasaitarras.
Por detrás, Deusto también se empleó a fondo en la última vuelta y adelantaron a Getxo. Un resultado que hace que los vizcainos pierdan el liderato de la competición.
En la parte media y baja de la tabla, Hibaika volvió a mostrarse competitiva, con un séptimo puesto que supo bien a los locales. Y por debajo, las dos últimas clasificadas fueron, nuevamente, Colindes y Santander, que no consiguen levantar cabeza y ejemplifican la mala época que vive el remo cántabro.
