donostia. Cuando el pasado domingo Orio y Zumaia se ganaron su plaza de ACT, los aficionados de Santurtzi comenzaban a autoconsolarse con los rumores. Se decía que algunos clubes cántabros tenían graves problemas económicos para poder afrontar una temporada más en la élite del remo y que era posible que alguno de ellos tuviese que renunciar a estar el año que viene en la Liga San Miguel, por lo que la Sotera podría agarrase a una posibilidad de dar el salto de categoría. Todas las miradas se fijaban entonces en Pedreña y Astillero que, efectivamente, no atraviesan un buen momento financiero a causa de la crisis económica y de la marcha de importantes patrocinadores. Los dos clubes han reaccionado ante el complicado escenario que se les presenta en el corto plazo y han puesto todo su esfuerzo en amarrar la plantilla que deberá pasear sus respectivas traineras por el Cantábrico. Para ambos clubes, esta semana tras el final de la temporada está siendo muy intensa, con continuas negociaciones y conversaciones con remeros y entrenadores.
Pedreña ha tenido que replanificar la próxima temporada partiendo de una nueva filosofía y ajustándose a una realidad económica totalmente diferente a la de los últimos años. El club cántabro celebrará una asamblea el próximo día 30 en la que se certificará que la Severiano Ballesteros contará con una tripulación más modesta formada por remeros de la casa. Calixto Presmanes, el presidente del club, reconoce que Pedreña contará con "un presupuesto muy reducido", por lo que las condiciones contractuales de los deportistas se ven drásticamente afectadas. "Los remeros recibirán únicamente los premios que se consigan en las regatas y lo que corresponda por los respectivos desplazamientos y kilometraje", explica Presmanes.
Hacer que la plantilla acepte unas condiciones tan extremas es, obviamente, complicado. De hecho, el presidente de Pedreña confirma que "han sido los propios remeros de casa los que nos han animado a seguir adelante de cara al año que viene", ya que en el seno de la Directiva sobrevolaba la posibilidad de renunciar a la categoría. Lo que no está tan claro es la continuidad del entrenador, Mauricio Monteserin. El técnico le ha pedido al club unos días para pensar si sigue haciéndose cargo de las riendas del equipo, pero todo parece indicar que Monteserin se ve más fuera que dentro.
El caso de Astillero, por su parte, viene de largo. El club presidido por Francisco Garate viene de una temporada muy dura, tanto en lo deportivo como en lo institucional. Jon Salsamendi se las vio y se las deseó en invierno para completar la plantilla. El donostiarra ha tenido que afrontar el calendario con una nómina muy reducida de remeros, lo que no le ha impedido proclamarse campeón de Cantabria y clasificarse para La Concha.
Aún así, el club no ha podido hacer frente a los pagos acordados con los deportistas, quienes a pesar de no recibir lo que les correspondía, se implicaron al máximo para seguir haciendo competitiva la San José XIV. Concluida la campaña, la directiva ha comunicado a la plantilla que cobrará el 100% de lo que les adeuda, aunque no se ha especificado cuándo. Es más, el club se ha comprometido a mantener esa premisa aunque se produzca un cambio en la presidencia de la entidad.
Los dirigentes de Astillero comienzan a esbozar la plantilla de 2013 y para ello se están reuniendo, uno por uno, con todos los remeros para explicarles las reducidas posibilidades económicas con las que cuentan para la siguiente temporada. Esta ronda de contactos finalizará este viernes. El primero en escuchar los planteamientos ha sido Salsamendi. El guipuzcoano está plenamente involucrado en el proyecto y todo parece indicar que aceptará seguir trabando en él. Eso sí, habría vinculado su intención de permanecer en Astillero a la respuesta de los propios remeros. Si la mayoría de la plantilla acepta las condiciones, Salsamendi seguirá un año más en el club.
orbañanos, renovado En otro orden de cosas, ya es oficial que Mikel Orbañanos seguirá el año que viene al mando de Hondarribia. El técnico oriotarra, que llegó al club en 2002, ha sido la clave de la progresión de la Ama Guadalupekoa en los últimos años y liderará un año más al equipo en el intento de superar las seis banderas conseguidas esta temporada en la Liga San Miguel y el título de campeón de España.