Síguenos en redes sociales:

Oyarzabal, ante el escándalo en Manchester: “Te sale la risa cuando pitan el tercer penalti a favor del United”

El capitán de la Real denuncia el arbitraje de Benoît Bastien: “Qué fácil que era pitar una cosa a favor de unos y lo difícil que era pitar a favor de otros”

Oyarzabal, ante el escándalo en Manchester: “Te sale la risa cuando pitan el tercer penalti a favor del United”EFE

“Es un poco la facilidad o las ganas que había para pitar hacia un lado y lo poco convencido que pitaba hacia el otro”. El capitán de la Real Sociedad, Mikel Oyarzabal, fue claro sobre lo que sintió con la derrota en Old Trafford ante el Manchester United, mediatizada por la actuación del árbitro, Benoît Bastien. “Tendría que hacer memoria, pero no tengo un día con esta sensación”, resumió su sentir el atacante eibartarra sobre una actuación arbitral con la que “te sale la risa, cuando pita el tercer penalti a favor de ellos, el propio jugador dice que no… Parece un chiste. Espero que no y espero que no vuelvan más días así”.

“Creo que es más la sensación de las ganas que tenía o lo fácil que era pitar una cosa a favor de unos y lo difícil que era pitar a favor de otros”, repitió reflexión Oyarzabal, que visto después en la televisión, reconoció que el penalti que él mismo sufre “es el más claro, visto luego, y el que más se tarda en pitar. Es un poco desesperante, triste y te hace daño que te echen de Europa nunca gusta ni es fácil, pero más cuando es de esta manera”.

El canterano realista demostró en la zona mixta de Old Trafford que serenidad y contundencia pueden ir de la mano. Que no hace falta gritar para contar las verdades del barquero: “Llega un momento en el que te dan ganas de marcharte o quedarte sentado en el campo y que hagan lo que quieran, pero tampoco. Es muy fácil decirlo, pero cuando estás dentro y por mucho que tengas la sensación de que te están ninguneando, tampoco puedes hacer nada. No está en mis manos que el árbitro decida una cosa u otra”.

Tampoco si la Real debería tomar alguna acción a nivel diplomático. ¿Algún comunicado público? Oyarzabal, preguntado por un periodista, ni quiso entrar en la cuestión: “No tengo ni idea, que haga lo que quiera. No voy a ser yo quien decida, así que que haga lo que considere”.

Las jugadas

El capitán, que atendió durante más de 20 minutos a los distintos medios desplazados desde Gipuzkoa a Manchester, con preguntas que giraron en torno a las jugadas clave del choque, su relación con el inefable Benoît Bastien y cómo, con todo, había visto al equipo sobre el césped de Old Trafford.

“Hombre si en un 2-1 hasta el minuto 83 con una roja y pitando tres penaltis, cuatro si quieres, pues determinante habrá sido. Que haya acertado o no…”, respondía Oyarzabal, que entró a valorar cada una de las acciones polémicas.

Solo salva el penalti que el United emplea para empatar el partido: “Para mí no lo es, pero si en directo lo pita, puedo llegar a entender que el VAR no actúe. Bueno, dudoso, de esos grises que decían que…”.

El segundo penalti no hay por dónde cogerlo: Aritz ve que le va a tirar por un lado, se queda quieto, no se puede hacer el invisible, se choca con él pero él está quieto, sin mover los pies ni sacar un brazo. No tiene ninguna duda para pitar el penalti, que es lo que a mí me extraña. Poco más… El tercer penalti que pita es una barbaridad. Que tenga que venir un jugador a decirte que no es penalti…”, repasó Oyarzabal, que puso en solfa la profesionalidad del árbitro visto cómo actuó en la acción de Hamari Traoré: “Si él cree que es penalti, por mucho que un jugador le diga que no es, tendrá que ir a mirarlo al VAR”.

“En directo él lo pita y es cuando habla con el otro… Que no sé si debería ser así, porque por mucho que un jugador te diga que no es penalti, si tú estás considerando que es penalti, tendrás que ir a mirarlo al VAR y que tu opinión es distinta”, valoró Oyarzabal, que se puso de ejemplo de lo que intentaba explicar: “Yo en el primer penalti puedo decirle que no es, y puede ser que sea claro. No sé si es un error por su parte o no, pero creo que tenía que haber ido a verlo, ver si se ha equivocado y pitar que no es penalti. Está muy bien el gesto del jugador, que con el resultado que había es más fácil que lo diga, pero es bueno por parte del jugador que lo diga y lo acepte, pero no sé si es el camino a seguir para el árbitro, si cree que es penalti, no tendrás que quitarlo porque te lo diga A o B. Tendrás que ir a verlo”.

📸 Estas son las mejores imágenes del Manchester United - RealEFE

22

La actitud del árbitro: nada que hablar

Fue un choque de mucho protagonismo arbitral. De intentar pedir explicaciones que el árbitro francés había prometido antes de empezar el partido. Iba a haber diálogo. “Antes del partido nos ha dicho que si había decisiones polémicas, condicionantes o que fuesen importantes, nos las iba a transmitir, para explicarnos, ver qué pensábamos, quedarnos todos claros y ya está. Luego lo que hacía era darnos su opinión, lo que para él había pasado y cuando nosotros hablábamos, decía que no, que ya estaba y que la conversación había terminado”, describió el capitán realista unas “formas de actuar y de ver, pero no creo que sean las correctas”.

En una de esas conversaciones terminó de ver tarjeta amarilla: “Me la saca por pesado, pero en ningún momento le he faltado al respeto, le he hablado con malas palabras, he intentado pedirle explicaciones y mostrarle cuál era nuestra opinión, pero él simplemente lo que decía era lo que pensaba y cuando le decíamos lo que creíamos, nos decía que la conversación había terminado, que ya estaba y que no había más”.

“Te da rabia, estás a muchas revoluciones, a muchas cosas”, reconoció Oyarzabal, frustrado e impotente ante este tipo de arbitrajes: “Te dicen que solo puedes hablar tú, te acercas a hablar, hablas pero no te dejan decir algo… Es frustrante, pero es el fútbol y es lo que hay. Todos tratamos de hacerlo lo mejor posible, cada uno desde su papel. Es una pena que te echen de Europa, pero sobre todo más cuando te lo hacen así”.

El partido estaba vivo”

Con todo, el jugador de Eibar consideró que la Real estaba haciendo un buen partido, con todo: “Hemos entrado bien al partido, el empate te da un poco de rabia por cómo es, pero el partido estaba abierto, con opciones para todos. Sin nosotros generar en exceso, ni muchas ocasiones, estábamos vivos, que era lo que queríamos. Sabíamos que no iba a ser fácil: el Arsenal el fin de semana aquí mismo no ganó”.

“Hay que poner las cosas en contexto, que el United llevará unos años malos, pero los jugadores que tienen no son cualquiera. Hay que ser conscientes del equipo que tenemos delante y de que les hemos plantado cara”, avisó Oyarzabal, que mostró sus ganas de mejora: “¿Que nos hubiera gustado hacerlo mejor y tener más ocasiones y más control? Obviamente, pero el partido estaba vivo hasta esos momentos en los que se te va todo al otro lado”.

Oyarzabal vio al equipo vivo durante gran parte del choque: “Cuando te meten el 2-1 de penalti y a los 5-10 minutos te expulsan en una expulsión dudosa es una manera muy fácil de cargarte el partido. Ellos no estaban 100% cómodos, no encontraban soluciones, nosotros con balón algo creábamos, sin generar excesivo peligro cara a portería, pero bueno, el tiro de Pablo, el córner… Estábamos ahí, con opciones para todos. Las dos decisiones del segundo tiempo te condicionan: el 2-1 del penalti y la expulsión a los 10 minutos”.

“Me hubiera dolido mucho más perder 4-1 y que te pase un equipo por encima, que no tengas opciones de hacer nada porque eres incapaz”, resumió Oyarzabal cierta sensación de orgullo que le dejó el equipo pese a tener que pelear con las manos atadas a la espalda: “Ha venido como ha venido y que la gente que ha venido, con la ilusión de creer que el equipo podía pasar la eliminatoria contra un Manchester United que creo que hay que darle el valor que merece, es motivo para buscar ese optimismo que pueda haber dentro, aunque ahora sea mínimo, y tirar por ahí”.

El futuro, solo Vallecas

Ahí dejó el capitán la última clave de futuro: toca recuperar y apretar en el sprint final por conseguir el sexto billete europeo consecutivo: “Si queremos tener el año que viene noches como las que hemos tenido estos años, nos quedan dos meses y medio de Liga que, pese a tener un poquito de distancia con esos de arriba, estamos vivos, y nos tenemos que creer capaces de darle la vuelta a esto, enchufarnos con los de arriba y tener momentos como estos el año que viene”.

No hay más objetivo ahora mismo que ganar en Vallecas: “El objetivo es ganar el domingo y dar un saltito arriba, enchufarnos con los de ahí arriba. Estamos un pelín lejos, pero estamos a 4 puntos del sexto o séptimo. Está ahí, cosa de uno o dos partidos, que acertemos y consigamos los resultados que queremos”.

Que nadie dé por perdida a la Real, avisa Oyarzabal: “Vamos a pelear hasta el último momento. En los últimos cinco años hemos entrado en la última jornada o incluso en el último minuto como en Pamplona o el Metropolitano. Ojalá podamos ganar e irnos al parón con otra cosa en la cabeza que no sea esta”.