La tarta europea ya se encuentra sobre la mesa de la Real Sociedad, preparada para ser degustada. El equipo txuri-urdin desea, sin embargo, ponerle la guinda a un pastel que ganaría en sabor edulcorado por una sexta plaza liguera. De este modo, los blanquiazules se clasificarían para la Europa League, no para la Conference, y podrían disputar el segundo torneo continental en importancia. Real y Betis son ahora los únicos candidatos a obtener el mencionado premio, existiendo en clave guipuzcoana un muy prometedor precedente. Data de hace solo dos años, de la temporada 2021-22, y deparó un calendario final muy parecido al que ahora vive la escuadra entrenada por Imanol Alguacil.
Entonces, la 36ª jornada del campeonato también tuvo lugar un jueves en Anoeta: la Real ganó al Cádiz (3-0) y se aseguró así un billete europeo, tal y como hizo anteayer ante el Valencia. Solo tres días después, los txuri-urdin disputaron a domicilio un duelo directo con su rival por la sexta plaza, el Villarreal en 2022 y el Betis ahora. Goles de Isak y Zubimendi (1-2) significaron la victoria en La Cerámica y aseguraron la Europa League, igual que un triunfo mañana en el Benito Villamarín garantizaría el mismo premio. Y en la jornada final aguardaba en el horizonte un encuentro casero frente al Atlético de Madrid, igual que esta campaña. Además, el rival directo, el propio Villarreal, debía cerrar la Liga visitando al Barcelona en el Camp Nou, cuando ahora el Betis finalizará la campaña midiéndose al Real Madrid en el estadio Santiago Bernabéu. Unas circunstancias muy parecidas.
Las cuentas
La Real conoce el camino. Se trata de repetir esta semana aquella senda que le llevó hace dos años a participar en la Europa League, objetivo para el que actualmente las cuentas resultan claras. Ganar en el campo del Betis sería sinónimo de sexta plaza final. Empatar allí depararía un empate en el average particular (el partido de Anoeta terminó 0-0) y permitiría a los txuri-urdin encarar en buena disposición la jornada final: un punto de ventaja y average general favorable (+12 los blanquiazules y +5 los andaluces). Y perder en Sevilla, mientras, otorgaría al equipo de Pellegrini una renta de dos puntos que obligaría a los de Imanol Alguacil a firmar la carambola total: ganar al Atlético de Madrid en Anoeta y esperar una derrota verdiblanca en el Bernabéu.
Un análisis completo de la situación exige contemplar una situación posible y que no conviene perder de vista. La Real se encuentra matemáticamente clasificada ya para jugar competiciones continentales en la temporada 2024-25. Pero este no es el caso del Betis, que aventaja en cinco puntos al Villarreal con seis en juego aún. El average particular entre andaluces y castellonenses está igualado pero, si miramos al general, el mencionado +5 del propio Betis supera al +0 de los de Marcelino García Toral. De este modo, concluimos que al conjunto sevillano podría bastarle un punto más para asegurarse al menos la Conference. ¿Cómo gestionarán los béticos esta situación?
Se trata de una incógnita. Y solo saldríamos de dudas si se diera el contexto necesario para ello. Imaginemos que el Villarreal alcanza ganando el tramo final de su partido contra el Real Madrid, este domingo en La Cerámica. Y pongamos también que, en ese momento, el Betis-Real Sociedad marcha con empate. ¿Se volcarían a por el triunfo los andaluces? Haciéndolo, podrían obtener el premio de la victoria. Pero se expondrían también a recibir un gol que no solo les eliminaría de la lucha por la Europa League, sino que supondría también un claro riesgo de perder la Conference en la última jornada a manos del Submarino. Por parte txuri-urdin, mientras, todo resulta más sencillo, pues el propio Villarreal no puede dar ya alcance a la escuadra guipuzcoana.