Poco a poco han llegado los cerca de 3.000 aficionados realistas que apoyarán mañana al equipo ante el Inter. En una jornada gélida, se han dejado ver por los lugares más emblemáticos de Milán, como la plaza del Duomo, que han visitado los padres de Mikel Oyarzabal; la galería de Vittorio Emanuel II y, ya por la noche, el barrio Navigili, junto al río. También ha llegado un avión con patrocinadores y compromisos del club txuri-urdin, además de familiares de los integrantes de la plantilla, y el alcalde de Donostia, Eneko Goia.