Dicen que la historia es cíclica. Más aún en una rivalidad como la de los dos grandes vascos, que desde los años 80 se ha equilibrado tanto. Es justo reconocer que el palmarés global no admite parangón, ya que el Athletic tiene y tendrá durante mucho tiempo más títulos (ocho Ligas y 24 Copas), pero algo ha cambiado desde que Jokin Aperribay tomó las riendas del club txuri-urdin. El presidente parece dispuesto a reescribir la historia. Si su equipo logra mantener los once puntos que saca a su eterno rival, logrará que bajo su mandato la Real haya acabado más veces por delante que su vecino. Como recordarán, Aperribay se hizo con el mando de la Real en diciembre de 2008 cuando el equipo se encontraba en Segunda División. La siguiente campaña logró el ascenso y las dos primeras temporadas logró consolidar el proyecto en la elite con una apurada salvación en la última jornada, puesto 15, y otra más aseada en el 12. Los rojiblancos se encontraban a otro nivel y sellaron billete para Europa con una sexta plaza y una décima, aunque también obtuvieron premio al haber disputado y perdido la final de Copa ante el Barça (todavía no había cambiado la normativa). También cayeron, en un éxito notable, en la de la Europa League ante el Atlético de Falcao.

En la 2012-13 se produjo el gran éxito de Philippe Montanier con la clasificación para la Champions, mientras que los zurigorris finalizaron duodécimos en el inesperado agrio final de Marcelo Bielsa. En el siguiente curso, los que entraron en la máxima competición de clubes fueron los bilbainos, al tiempo que la Real se clasificó para la Europa League vía previas que no superó en Krasnodar. El Athletic volvió a ir a Europa gracias a su séptima posición en la 2014-15, mientras que los realistas se quedaban en tierra de nadie. Y en el siguiente curso, los vecinos repitieron éxito con la quinta plaza mientras la Real concluía novena.

No fue hasta la magnífica campaña con Eusebio Sacristán cuando los realistas lograron imponerse en el particular duelo vasco gracias a un gol en el último minuto en Vigo de Juanmi, aunque los dos compitieron en Europa el siguiente año. En la 2017-18 las cosas se complicaron para ambos, pero la Real logró finalizar otra vez duodécima y los vizcainos se fueron hasta la decimosexta posición en la primera aparición de Imanol sustituyendo a Eusebio. 

Es cierto que los rojiblancos se quedaron sin premio europeo, aunque fue el Athletic quien acabó por delante en la 2018-19 (octavos y novenos respectivamente) en el segundo aterrizaje de emergencia del oriotarra. A partir de ahí, ha sido sin duda quien ha cambiado por completo los resultados de la rivalidad. La Real ha acumulado de forma consecutiva tres pasaportes para el viejo continente al quedar sexta, quinta y sexta. El Athletic se ha tenido que conformar con ser undécimo, décimo y octavo sin recompensa. 

En total, desde que está Aperribay son seis veces las que ha acabado cada uno por delante. Esta campaña servirá para desnivelar la contienda. Y por ahora la cosa pinta muy bien para los realistas a falta de sólo diez jornadas y en vísperas de otro gran derbi.

Por si fuera poco, su proyecto es admirado y analizado en la Liga y en el extranjero. Sus mejores canteranos hace tiempo que no tienen ninguna intención de cruzar la A8, lo cual merma mucho el potencial de su poderoso contrincante histórico, y sus filiales gozan de mucha mejor salud con opciones de ascenso. El Bilbao Athletic parece condenado al descenso a la 2ª RFEF.