Los últimos días del mercado invernal de fichajes se vieron marcados por noticias de índole internacional, protagonizadas por clubes y futbolistas de renombre. Mientras, equipos de la zona baja de la Liga aprovechaban para apuntalar sus plantillas con pequeñas revoluciones, caso de un Real Valladolid que visitará este domingo a la Real Sociedad (18.30 horas) con ánimos renovados. Sumaba cinco derrotas consecutivas sin goles a favor (cuatro en Liga y otra en Copa) hasta que el pasado domingo se impuso al Valencia (1-0) en el Nuevo Zorrilla, gracias a una de esas dianas que cambian tendencias. La logró en el tiempo de descuento, y con dos refuerzos invernales cocinando el tanto: asistencia de Darwin Machís y remate decisivo de Cyle Larin.
El extremo venezolano, ex del Granada, acababa de aterrizar libre en Pucela procedente del Ciudad Juárez (México). El ariete canadiense, presente en el último Mundial, ha llegado cedido por el Brujas belga. Pero aún hay más, otros tres refuerzos. El marroquí Amallah, quien con Amrabat y Ounahi completaba en el torneo de Catar una medular de lujo, ha sido comprado por un millón de euros al Standard de Lieja. Y además el Hellas Verona ha cedido hasta final de temporada al pivote camerunés Martin Hongla.
Efectivamente, aún no salen las cuentas: faltaría por citar aquí una quinta incorporación. Pero lo cierto es que esta se ha visto finalmente frustrada. Se trata de la cesión del extremo caboverdiano Jovane Cabral, procedente del Sporting de Lisboa. La inscripción de este movimiento en la Liga se produjo fuera de plazo, lo que ha impedido al futbolista ser inscrito. El Real Valladolid alega problemas en el sistema informático habilitado para las altas de futbolistas, ha apelado a la FIFA y ha visto denegada su solicitud, circunstancia ante la que el propio club comunica que seguirá recurriendo frente a las instancias pertinentes.
