No es cuestión de comenzar a comparar temporadas, pero en épocas de duda y de angustias por plagas de lesiones, no está mal que se tengan en cuenta datos referenciales para constatar el buen inicio del curso txuri-urdin. Es cierto que la campaña anterior llevaba tres puntos más a estas alturas de la temporada, pero si tenemos en cuenta los resultados en los mismos encuentros del año anterior, la Real sumó los mismos diez puntos. Ganó también en Cádiz y Elche y al Espanyol en casa, perdió frente al Barcelona y Atlético y empató en Getafe.

Martin Zubimendi, durante un partido en Anoeta. Ruben Plaza

Sin olvidar que en Europa la Real ha sumado dos de dos, con el triunfo en Old Trafford y al Omonia en casa, cuando al final estival anterior solo empataron en Eindhoven y en Donostia ante el Mónaco. Cuatro puntos de distancia y con un pie en los cruces, mientras que por aquel momento todo estaba por decidir en las cuatro jornadas.

Aunque Luis Enrique ha pasado olímpicamente del centro del campo blanquiazul, que, a falta de la aparición de referentes ofensivos, se ha convertido en la gran estrella de este equipo. Zubimendi, Brais y Merino podrían haber estado perfectamente en la convocatoria del seleccionador y tendrían muchas posibilidades de entrar en las quinielas para acudir al Mundial de Catar. Las dos torres, Brais y Merino, ya han disputado cuatro y once partidos con la absoluta. Zubimendi también se ha estrenado, aunque lo hizo en unas circunstancias especiales, ya que en realidad la que disputó ese amistoso fue la sub-21. Él mismo aclaró que “eso no vale” entre risas cuando fue preguntado por la circunstancia. De Silva no hablamos porque se retiró de la selección, puesto que todavía cuando se pone a jugar podría actuar en cualquier equipo o país.

El caso es que Zubimendi ha comenzado la temporada a un nivel excepcional, algo que, como suele suceder, no está pasando inadvertido para los secretarios técnicos de clubes más poderosos económicamente. Aunque él siempre ha tratado de restar hierro a la negociación sobre su renovación, lo cierto es que los rumores e informaciones sobre el futuro de Busquets no han tardado en volver a señalarle como el gran objetivo azulgrana para el siguiente curso. “Ya dije que hay que tomarlo con tranquilidad. Estamos hablando, discutiendo de buena manera todo lo que hay que tratar, pero va todo bien. Es que la prensa ha sacado muy pronto datos que no eran reales. Cuando parecía que todo iba muy avanzado ni siquiera habíamos empezado a hablar casi. Las conversaciones son fluidas”, declaró a este periódico cuando fue preguntado por la marcha de las conversaciones.

Una de las claves o de los caballos de batalla sería el listón de la cláusula de rescisión del contrato: “Es verdad que la Real se caracteriza de primeras por poner una cláusula muy alta a los que somos de aquí y es algo a tratar, como todo lo demás. Intentaremos que sea la más adecuada posible”.

En principio, es pronto para que se enciendan las alarmas, pero, al igual que sucede con Imanol, no se entiende que se dilaten unas negociaciones en las que, al menos a día de hoy, todas las partes parecen dispuestas y convencidas de prorrogar su vinculación.

Martin Zubimendi, durante la entrevista con NOTICIAS DE GIPUZKOA este mes de agosto. Iker Azurmendi

Zubimendi todavía tiene contrato hasta 2025, con una cláusula que protege a la Real al elevarse hasta los 60 millones de euros, una cantidad que comienza a quedarse pequeña en función de la entidad de los clubes que le siguen la pista y de su innegable evolución.

El donostiarra nunca ha ocultado su sentimiento txuri-urdin, pero también su ambición para no cerrarse puertas e intentar llegar lo más arriba posible. Según la prensa catalana, Busquets podría emigrar el curso que viene a la liga de Estados Unidos y ayer tanto El Mundo Deportivo como Marca le colocaban como el gran favorito para su stituirle. Eso sí, como siempre suelen hacer en este tipo de publicaciones, afirmaron que la Real podría dejarle libre por 40 millones. Se desconoce en base a qué ni se recuerda ningún favor de ese tipo desde Barcelona al club txuri-urdin... Por comentar.