Fue una de las ruedas de prensa de la temporada en Zubieta. Preguntado por el hecho de que no estaba apostando por Karrikaburu y por el sorprendente palo que le asestó cuando parecía con opciones de entrar en una convocatoria, Imanol Alguacil respondió con contundencia: “Dije la verdad, pero es lo mismo para todos los del filial. Cuando apostamos por gente del Sanse, a todos les falta una barbaridad para llegar a ser jugadores del primer equipo de la Real. Si queremos estar todos los años en Europa, competir contra grandes equipos o contra los primeros de la Liga, necesitamos de ellos, pero a día de hoy ningún jugador del Sanse está preparado para eso. El mismo palo se lo daría a cualquiera del filial. Aún les queda un mundo para ser jugadores del primer equipo y en eso estamos. No fue ningún palo diferente el de Karrikaburu al que le podamos dar al resto. Sola, lo mismo, tiene muchas cosas buenas, pero otras a mejorar. Y Turrientes, lo mismo. Me preguntes por quien me preguntes, aún están muy lejos de ser futbolistas competitivos de Primera División”.
El técnico llegó aún más lejos cuando le incidieron en que al punta de Baztan no le había subido ni a los entrenamientos entre semana: “Es que no ha estado disponible, ni siquiera ha jugado en el Sanse, como en los dos últimos partidos. No he podido echar mano de él, y eso que yo he pedido echar mano de él, ni de Urko, de Sola... La Segunda División les ha exigido tanto que no han estado disponibles para entrenar con el primer equipo. Diría incluso que también se han perdido entrenamientos con el filial. Por eso cuando hablamos de jugadores del filial con gran futuro, incluso competir en Primera cuesta una barbaridad”.
Como sucede en todas las pretemporadas, pero sobre todo cuando se afronta un cambio de ciclo, no han tardado en aparecer las críticas y la desconfianza por si los anunciados cuatro o cinco refuerzos van a desequilibrar el porcentaje de futbolistas de casa y foráneos. Sin embargo, parece pasar inadvertido el movimiento dado por la Real, con la intención de tratar de allanar el camino al primer equipo a sus canteranos más prometedores, organizando un casting en el stage que no han perdido la confianza del club a pesar de no haber podido evitar el descenso del filial.
Jon Karrikaburu, Robert Navarro, Jon Ander Olasagasti, Beñat Turrientes, Naïs Djouahra, Jon Pacheco, Urko González de Zárate, Ander Martín y Álex Sola siguieron ejercitándose ayer en Anoeta a las órdenes de tres preparadores físicas y siempre bajo la supervisión de Imanol Alguacil. La gran novedad es que lo han hecho junto a Carlos Fernández que ha vuelto antes para ser uno más desde la primera práctica del 7 de julio.
El oriotarra ya ha regresado de vacaciones y se encuentra volcado en la planificación de la próxima temporada. De esos nueve, hay uno que tiene garantizado un dorsal del primer equipo, que es Jon Pacheco tal y como confirmó hace unas semanas Robert Olabe. Aunque todavía no ha habido ninguna notificación oficial, Sola y Turrientes también contarían con hueco entre los mayores.
El resto ya lo tiene más complicado. Robert Navarro también dispone de boletos para quedarse. Ander Martín, por su polivalencia para jugar de lateral y de extremo y Naïs, dada la escasez de delanteros de banda, también mantienen su pequeña esperanza.
Olasagasti podría marcharse cedido, ya que la competencia en su puesto es feroz, al igual que Urko, que necesita encontrar su espacio. Por su parte, Karrikaburu se quedará a caballo entre el filial y el primer equipo, como declaró en su momento Olabe.
La realidad es que no muchos equipos en la elite puede alardear de que, independientemente del número de jugadores de casa con los que ya contaba en su primer equipo, suba este verano a tres elementos de su filial. La prolífica cantera de Zubieta, referente en el país como lo confirmó el año pasado tras el ascenso del segundo y el tercer equipo, es una fuente inagotable de futbolistas que abastecen al primer equipo. Como declaró Olabe en una conferencia, “el jugador de casa nos hará más fuertes y el que venga de fuera nos hará mejores” y en base a esa consigna van a afrontar un cambio de ciclo como el que anunció en el filial y en el C, algo que también afecta al plantel de Imanol. Hasta la fecha, todo se resume con que han salido Willian José, Januzaj, Sorloth, Rafinha, Luca Sangalli, Kevin y Portu y pueden acompañarles Zubiaurre, Zaldua, Guridi, Bautista, Guevara y varios de los que están completando en Anoeta el stage previo a la pretemporada. Solo están confirmados las incorporaciones de Pacheco y de Ali Cho. Pero aún estamos a 29 de junio...
Mercado. El hecho de que el mercado continúe muy parado en estas primeras semanas tras la conclusión de las ligas europeas tiene un lado bueno para la planificación txuri-urdin y es que, al menos por ahora, sus pesos pesados parecen a salvo de pretendientes más poderosos. Uno de los clubes del que se esperan inversiones millonarias es el Newcastle y ayer medios británicos colocaban a Alexander Isak en su punto de mira. Algo que por cierto ya habían hecho con Mikel Merino, que precisamente llegó a la Real procedente de la ciudad del norte de Inglaterra. Como manifestó Olabe, “tenemos cero inquietud en vista de cómo les hemos visto. Que vean a la Real como un lugar para seguir creciendo”. Aunque el mercado es un “ser vivo” no se esperan noticias desagradables en la Operación Salida.
